Emile Durkheim nació en la ciudad de Épinal, Francia, el 15 de abril de 1858. Hijo de una familia con tradición de rabinos judíos, inició su formación para convertirse en uno de ellos; sin embargo, llegada la adolescencia descubrió su pasión por el método científico que se oponía a una educación basada en principios religiosos; “rechazó su herencia (de rabino) y abrazó el agnosticismo (…) el interés que mantuvo por de por vida por la religión fue más académico que teológico.”[1] Durkheim vivió durante el 2do periodo Industrial; un periodo de gran expansión económica e industrial; “la pérdida de la guerra franco-alemana y la ocupación de su ciudad natal, Épinal, en 1870”.[2]
Durkheim ingresó en la École Normale Supérieure (Escuela Normal Superior) en el año de 1879 y formó parte de una de las generaciones más brillantes del siglo XIX, junto con Jean Jaurés y Henri Bergson, importantes intelectuales franceses y con Fustel de Coulanges de quien recibió gran influencia en su interpretación sobre el papel que desempeñan las religiones en la estructura social y a quien dedicó su tesis universitaria.[3] Lo apodaban “El Metafísico” por su interés en cuestiones filosóficas.[4]
En su juventud, Durkheim estudió críticamente a Montesquieu y Rousseau, luego a los fundadores de la sociología, Saint Simon y Comte, más adelante a Spencer y Espinas. Durante su viaje a Alemania se acercó al pensamiento de Simmel, Tonnies y Wundt; siendo este último quien más lo acercó al método científico que despertaba en él tanto interés. Se le considera, a Durkheim, heredero y continuador del pensamiento de Auguste Comte por su gran influencia positivista y por su estudio en las bases de la estabilidad social[5].
Emile Durkheim se doctoró en filosofía de la Escuela Normal Superior con su tesis sobre “La División del Trabajo Social” que se publicó en 1893. Y algunas de sus principales obras son: Las Reglas del Método Sociológico (1895) en el que propone cómo abordar los hechos sociales en forma sistemática y científica: L´Année Sociologique (1896) Revista de Sociología y Antropología; El Suicidio (1897) que fue la primera investigación sociológica basada en datos y estadísticas; La Educación Moral (1902); Las formas elementales de la vida Religiosa (1912) en la que propone una teoría de la Religión dada su creciente preocupación por los hechos sociales y Lecciones de Sociología (1912) en la que da algunas lecciones de moral profesional; entre otras[6]. Murió en Paris, Francia, el 15 de noviembre de 1917.
“La División del Trabajo Social”
Para llegar al tema de la anomia, tema de interés en el presente trabajo, se considera importante señalar, de manera sumamente simple, algunos conceptos previos que se pueden encontrar en la tesis doctoral de Emile Durkheim, “La División del Trabajo Social” y en la que dicho concepto, la anomia, se relaciona directamente con la sociedad a diferencia de su obra de “El Suicidio”, relacionado con el individuo[7].
A Durkheim le interesó el estudio de las bases de la estabilidad social “y creyó encontrarlas en la moralidad y la religión, en los valores compartidos por cada sociedad[8]”. En una época de tanto desarrollo económico e industrial, era importante darle un carácter moral a la división del trabajo; para ello, insistió en ver este fenómeno, a este hecho social, como una “cosa” y determinar su función en la sociedad. Función, ya que lleva la implícita la idea de correspondencia y no fin u objeto, que sólo determinan resultados[9].
“Puesto que aumenta (en la división del trabajo) a la vez la fuerza productiva y la habilidad del trabajador, es la condición necesaria para el desenvolvimiento intelectual y material de las sociedades; es la fuente de la civilización, (…) (sin embargo) no se ha probado todavía que la civilización sea una cosa moral.”[10]
Es difícil encontrar una herramienta que pueda medir la moralidad de la civilización y aún más, encontrar una que mida cómo cambia ésta a medida que progresa; pero los datos sobre suicidios y crímenes, el aumento de éstos a medida que las artes, ciencias e industrias progresan, nos pueden servir como herramienta para medir su inmoralidad. “Puesto nada hay en la civilización que ofrezca ese criterio de la moralidad, moralmente es indiferente”[11] Desde esta perspectiva, los beneficios económicos de la división del trabajo, están compensados por sus inconvenientes morales.
Durkheim busca otra función de la división del trabajo que lo dote de carácter moral; y nos da como ejemplo, la amistad. Cuando se la da amistad entre dos personas, puede ser por la semejanza que existe entre ellos ó por la complementariedad que se da; es decir, podemos ser amigos de alguien porque se parece a nosotros ó porque tiene características de las que carecemos y esto nos hace más completos; “… buscamos entre nuestros amigos las cualidades que nos faltan, porque, uniéndonos a ellos, participamos en cierta manera de su naturaleza y nos sentimos entonces completos”.[12] Cuando una amistad se da por complementariedad, aparece una división de funciones, una división de trabajo, ya que dos pueden hacer más que uno sólo.
“Vémonos así conducidos a considerar la división del trabajo desde un nuevo aspecto. En efecto, los servicios económicos que puede en ese caso proporcionar, valen poca cosa al lado del efecto moral que produce, y su verdadera función es crear entre dos o más personas un sentimiento de solidaridad[13]”
Otro ejemplo que nos explica el carácter moral de la división del trabajo y la solidaridad que genera, es la relación conyugal, gracias a la división de los sexos (hombre-mujer),y la especialidad en las actividades que cada uno de ellos realiza. Con estos dos ejemplos (aunque en el caso de la solidaridad conyugal es más extensa y abarca más conceptos que superan el objetivo del presente trabajo) Durkheim afirma que “el efecto más notable de la división del trabajo no es que aumente el rendimiento de las funciones divididas, sino que las hace más solidarias”[14] además, desempeña el mismo papel en grupos más extensos pero con más amplitud, ya que “esas grandes sociedades políticas no pueden tampoco mantenerse en equilibrio sino gracias a la especialización de las tareas; que la división del trabajo es la fuente, si no única, al menos principal en la solidaridad social”[15] En este sentido, Durkheim afirma, que la división del trabajo tiene un carácter moral “pues las necesidades de orden, de armonía, de solidaridad social pasan generalmente por ser morarles”[16]
Pero este tipo de solidaridad no se ha dado siempre ni en todas las sociedades. En la antigüedad, cuando los individuos eran más similares, es decir, cuando una sola persona realizaba muchas actividades diferentes y, en la sociedad, la mayoría de ellos realizaban esas mismas actividades, la solidaridad se daba de una manera mecánica. En el mundo moderno, cuando las personas empiezan a especializarse en alguna actividad, la solidaridad se da de manera orgánica, ya que “la fuerte especialización de cada individuo origina una gran interdependencia, base de la cohesión y solidaridad grupal, de las personas con su sociedad (…) En las formas de solidaridad orgánica los individuos se desmarcan del grupo, formando una esfera propia de acción, pero al mismo tiempo la división del trabajo y la separación de funciones es la fuente o condición de equilibrio social.”[17]
La Anomia
Para Durkheim, la “patología central de las sociedades modernas es la división anómica del trabajo”[18]. Pensaba que la división del trabajo compensaba el debilitamiento de la moralidad colectiva “pero no podía enderezar plenamente la relajación de la moralidad común, a resultas de lo cual la anomía constituía una patología asociada con el nacimiento de la solidaridad orgánica[19]”
La anomia aparece cuando los individuos, al realizar actividades altamente especializadas, se alejan del grupo, y sus actividades, al ser cada vez más aisladas, se perciben carentes de sentido. La anomia es el debilitamiento de la moral.
“Durkheim concibe la anomia como la ruptura de la solidaridad. La anomia, en este caso, es expresión de una crisis de diferenciación, que es consecuencia de una división del trabajo coercitiva que tiene una influencia disolvente en la sociedad. La anomia aquí es menos una transgresión de una regla que un vacío de esa regla. La ausencia de reglas produce desintegración social, en tanto que traduce la ruptura de la solidaridad en la sociedad”[20]
La sociedad, el individuo, pierde los valores compartidos, cae en la anomia y experimentan ansiedad e insatisfacción. En “El Suicidio”, Durkheim estudia, cómo la anomia “expresa la incapacidad del individuo para poner coto a sus deseos y traduce la existencia de un tipo de personalidad mórbida a la que dio lugar la sociedad moderna”[21]
Sin embargo, para Durkheim, la anomia es una patología, es decir, puede remediarse a través del reforzamiento de la moralidad.
El libro “La división del trabajo social” del filósofo francés Emile Durkheim es un estudio, a manera de relato (por la claridad y sencillez con que está escrito), que nos enriquece por la cantidad de conceptos que desarrolla el autor y por la forma en la que explica que se construye un fenómeno tan debatido y discutido como lo es la división del trabajo. La capacidad que tiene Durkheim para poder observar y estudiar los hechos sociales como “cosas” nos permiten, si no ser completamente objetivos, sí ver la función que tienen en la vida de las sociedades.
Pienso que existe un debate muy interesante entre la concepción que tenía Carl Marx sobre la división del trabajo y la que nos da Durkheim. Son dos maneras de ver un mismo hecho y, en ambos casos, argumentando de manera magistral. Lo que es inmoral para uno, es mostrado como moral para el otro. La Anomia para Durkheim podría identificarse directamente con la Alienación para Marx; en ambos casos se trata de una consecuencia de la especialización y de la pérdida de la comunidad.
Considero que es poco el espacio y el tiempo para hacer una exposición más completa sobre los conceptos de Durkheim que valen la pena mencionar: los hechos sociales materiales, los inmateriales, el Derecho, la religión, los tipos de suicidio (uno de ellos es precisamente el anómico), etc., y que son necesarios para la comprensión de teorías sociológicas y de conocimiento empírico. Sin embargo, considero que esta competencia ha sido una buena aproximación a la obra del autor.
[1] Ritzer, George, (1993). “Teoría Sociológica Clásica”. 1ra Edición; McGraw-Hill, España; pág. 221
[2] Políticas.Net, Revista Digital, Revisada el 23 de julio de 2008 y disponible en http://usuarios.lycos.es/politicasnet(autores/durkheim.htm
[3] Wikipedia, Enciclopedia Digital, Revisada el 23 de julio de 2008 y disponible en http//es.wikipedia.org/wiki/Fustel_de_Coulanges
[4] Luventicus, Revista Digital, Revisada el 23 de julio de 2008 y disponible en http://www.luventicus.org/articulos/03U011/durkheim.html
[5] Ibíd
[6] Wikipedia, Enciclopedia Digital, Revisada el 23 de julio de 2008 y disponible en: http://es.wikipedia.org/wiki/%C3%89mile_Durkheim#Principales_obras
[7] Manrique, Arturo (2001). “Algunas Precisiones en torno al concepto de Anomia en Sociología”. Escuela Nacional de Conciliación Extrajudicial. Ministerio de Justicia de Perú; Perú. Disponible en: http://www.minjus.gob.pe/enmarcando/edicion1/PDF/Precisiones.pdf
[8] Luventicus, Op Cit
[9] Durkheim, Emile. (1893) “La División del Trabajo Social”. Libro Primero. La Función de la División del Trabajo. Capítulo Primero. Método para Determinar esta Función. (sin num de pág)
[10] Ibíd.
[11]Ibíd
[12] Ibíd
[13] Ibíd
[14]Ibíd.
[15] Ibíd.
[16]Ibíd
[17] Wikipedia, Enciclopedia Digital, revisado el 23 de julio de 2008 y disponible en: http://es.wikipedia.org/wiki/Solidaridad_(sociolog%C3%ADa)
[18]Ritzer (1993), ob. Cit. pág. 216
[19] Ibíd
[20] Manrique, (2001) Ob. Cit. Pág. 1
[21] Ibid.
5 comentarios:
Elsa, te felicito por tu trabajo publicado en Actores Sociales, creo que es una forma de dar a conocer lo que los alumnos piensan sobre ciertos temas, en este caso sobre uno de nuestros clásicos.
Por ello me atrevo a plantear algunos puntos que me parece pueden enriquecer el debate acerca de Durkheim, sobre todo en nuestra actualidad, tan necesitada de reflexión y debate que contribuyan a construir un país más democrático.
1. En primer lugar comentaría que en La división del trabajo social, Durkheim aborda como tema central la naturaleza de los cambios y transformaciones que se dan como consecuencia del paso de una sociedad tradicional a una sociedad moderna. Este punto es central porque es algo que comparten los tres grandes clásicos de la sociología: Marx Durkheim y Weber.
2.- Para Durkheim, el cambio fundamental que puede explicar el paso a la sociedad moderna, sería la divisón del trabajo; ésta no se refiere únicamente a la esfera estrictaente de la producción económica (aquí difiere de Marx), sino que involucra otros aspectos como el gobierno, el derecho, las artes, la educación y las ciencias en general.
3.- En relación al estudio que hace nuestro clásico de los "procesos anómicos", comentaría que Durkheim ve a la anomia como aquella situación social en que la regulación de la moral y de los colectivos, es insuficiente y por ello no se pueden satisfacer los deseos y aspiraciones de los individuos.
4.- Podrìamos preguntarnos ¿por qué se dan los procesos anómicos?
Nuestro clásico plantea que lo podríamos ver desde tres aspectos:
a)Los procesos de industrialización, propios de la modernidad, no sólo satisfacen las necesidades humanas tradicionales, sino también se crean nuevas necesidades, de hecho se crean más de las que se pueden satisfacer y por ello viene la frustración;b) Los procesos de modernización destruyen o perturban las relaciones, vínculos y las regulaciones de la sociedad tradicional, pero no crea al mismo tiempo instituciones o espacios capaces de cohesionarla;c)También la nueva ideología moderna contribuye a este proceso de anomia, porque los mitos, los valores y en si todo el imaginario social que plantea van provocando este fenómeno: el ejemplo serían los héroes que comienzan a crearse con la modernidad, Don Juan, Fausto, con anhelos de infinitud (inmortalidad que reta a Dios) con voluntades trasgresoras.
Desde mi punto de vista, el concepto de anomia, no puede identificar a Durkheim y a Marx, aunque ambos son hijos de la modernidad, el problema en que abordan el problema de la injusticia es distinto, quizás al plantear la cuestión de los procesos anómicos, Durkheim se acerca a Marx, en la forma en que aborda de manera apasionada los problemas del trabajo en la modernidad. Pero Marx es más incisivo, contundente al plantear los problemas de la alienación como un proceso histórico de explotación.
También considero, que el suicidio (como proceso anómico)no debe ser visto unicamente desde el lado del individuo en si, ya que en el planteamiento de Durkheim de que el suicidio no es una renuncia a la vida, sino a la sociedad donde se vive, allí esta el lazo entre individuo y sociedad, allí le está dando todo el carácter social.En el planteamiento que hace nuestro autor de los tipos de solidaridad (mecánica-orgánica) y que a su vez tiene que ver con la conciencia colectiva y la conciencia individual,el rompimiento de la solidaridad colectiva por parte de los procesos de modernización traen consigo la individualización y con ello los procesos anómicos, que aun en nuestros días "tan modernos" siguen produciendo suicidios porque esta "lógica moderna" que prometía la felicidad no ha logrado cumplir dicha promesa.
Pues tanto texto como comentario son muy ilustrativos. Me gusto encontrame con una discusión academica de nivel y tan cercana. gracias Vero por el texto, gracias maestro Manuel por sus observaciones.
Aunque debo reconocer mi inclinación por Marx, no dejo de admirar "el lente" por el que veía Durkheim y su capacidad de teorizar. Su obra no es nada sencilla pero pienso que nos da argumentos para comprender muchas cuestiones que vivimos hoy.
Gracias Maestro por sus comentarios; igual a tí Nancy. Prometo postear más mis pininos
Te felicito por tu ensayo.. aunque tengo solo 16 años estoy muy interesada en la sociología y un estudio de Durkheim que indudablemente fue uno de los padres de la sociología me permite adentrarme mas en mis estudios y sentirme mas interesada en el tema. Es increíble como un estudio puede demostrar de forma tan propicia y concreta la realidad de una sociedad en si.
Yo vivo en Argentina, y acá la anomia es un mal que acecha a nuestra sociedad, la cual caracteriza por un incumplimiento de las normas , que estan tan debilitadas que no son siquiera visibles.La emancipación del juicio indivudual sobre el juicio colectivo es una clara muestra de la ruptura de los lazos solidarios de la sociedad . Yo creo, que la anomia que nos asecha es la principal causa de nuestro subdesarrollo , ya que tanto individualismo e incumplimiento de reglas morales hacen imposible la democracia y nuestra sociedad no tiene supremacía moral suficiente para imponer reglas que hagan posible la cohesión y regularidad de nuestro país.
Gracias por el espacio =)!
Sofi
Your blog keeps getting better and better! Your older articles are not as good as newer ones you have a lot more creativity and originality now keep it up!
Publicar un comentario