Por Jorge Zepeda Patterson
miércoles, 24 de septiembre de 2008
ARTÍCULO sobre prensa en México
Por Jorge Zepeda Patterson
viernes, 19 de septiembre de 2008
ARTÍCULO sobre seguridad en México
Breves comentarios a la política de seguridad de Felipe Calderón
Úrsula Alanís Legaspi
Socióloga. Estudiante de
La noche del 15 de septiembre resultó sangrienta. La explosión de dos granadas de fragmentación dejó muertos y heridos en el Centro de Morelia. El caos poco a poco destruyó lo que en un principio pretendía ser una gran fiesta.
Pasada la media noche, el olor a sangre fresca y las imágenes de cuerpos desfallecientes provocaron indignación y temor entre la multitud que ahí se encontraba, y horas más tarde, en la población del resto del país.
¿Quién o quiénes perpetraron el ataque? y ¿Por qué lo hicieron? fueron las primeras dos interrogantes resultantes de este atentado.
El Gobierno de Michoacán y el Gobierno Federal presuponen que integrantes del cártel del Golfo fueron los responsables de este atentado ‘terrorista’. Esta línea de investigación no suena descabellada, si se analiza la fiereza con la que el narcotráfico defiende sus territorios y alerta a sus enemigos.
El ataque cometido a la sociedad moreliana indigna y preocupa, y deja manifiesto la cada vez más decadente y poco operativa política de seguridad del Gobierno Federal.
Es cierto que el país nunca antes había vivido un hecho tan cruel y cobarde, y también es cierto que nunca antes habíamos vivido en un clima de inseguridad tan lacerante. Ante este panorama habrá que recordar que desde su llegada al poder, Felipe Calderón ostentó la instrumentación de una política de seguridad que en un principio prometió aniquilar la violencia y el narcotráfico, males que indudablemente son enemigos del progreso y el desarrollo de cualquier nación. A lo largo de los casi dos años de gobierno de Calderón, México ha vivido momentos más que sangrientos. Día tras día los medios de comunicación dan muestra de ello. No acabamos de deglutir una noticia de esta especie, cuando al día siguiente nace otra que la supera en toda dimensión.
Muertos, decapitados y torturados han aparecido por todo el país mostrando la imparable ola de violencia que nos circunda. El crimen organizado se ha apoderado de todo el territorio nacional. Combatirlo amerita algo más que la organización de cumbres de seguridad y de marchas ciudadanas, requiere de un sistema efectivo de procuración de justicia, pero sobre todo, del desarrollo de un proyecto de nación, que favorezca el crecimiento de la economía nacional, la cual, desde la llegada de los gobiernos tecnócratas, a principios de los años ochenta, se ha adelgazado por la operación de políticas económicas partidarias de la privatización y el libre mercado.
Las organizaciones criminales, sea cual sea su naturaleza, son el reflejo de nuestra degradación social. Aniquilarlas se antoja difícil, si se toma en cuenta que cada vez hay más familias y poblaciones que viven de las ganancias resultantes de sus actos, a todas luces, reprobables.
Por ello me pregunto, si acaso no sería mejor combatir estos malos a través de una agenda política social eficaz, ya que, al parecer, a Felipe Calderón se le ha olvidado que las políticas educativas, alimentarias y de empleo también deben ser consideradas de seguridad nacional. Sólo espero que no conteste con un: “Y yo por qué”.
lunes, 15 de septiembre de 2008
ENSAYO sobre Educación rural
ESCUELA SECUNDARIA
www.escuelasecundaria.dnsalias.com
El Referente de
Mtro. Manuel Hernández Pérez
Sociólogo e historiador. Profesor de
Sociología-SEA de
INTRODUCCIÓN
Los proyectos educativos en el periodo posrevolucionario conservaron las intenciones de civilizar y homogeneizar la cultura de la gente en el medio rural. Intelectuales y pedagogos provenientes de las clases medias de las ciudades defendieron la idea de que era necesaria una formación especializada de los maestros que se encargarían de dicha tarea.
En un inicio, la preparación de maestros rurales fue pensada sólo como una capacitación rápida, pero más adelante se planteó como un proceso de formación amplio que debía ser, ante todo, una enseñanza de tipo práctico, ligada a los requerimientos y necesidades de la vida del campo. La concepción de una enseñanza práctica sirvió de punto de enlace de tradiciones educativas del siglo diecinueve como la enseñanza objetiva, racional y vocacional, con modelos pedagógicos novedosos como la escuela de la acción (basados en John Dewey), en menor medida la educación racionalista y la educación socialista de los años treinta.
El presente trabajo aborda de manera introductoria uno de los pasajes más apasionantes y fundadores de la educación en México: la escuela rural mexicana, que inicio sus pasos en los años treinta y que algunos de sus postulados aún perviven en los métodos de enseñanza
I. INICIOS DE
En los inicios de este proyecto modernizador y de construcción del estado posrevolucionario, donde la mayoría de la población se concentraba en las comunidades rurales, era de vital importancia elaborar un plan para incorporar al campesinado a este nuevo esquema. En los inicios de los años treinta el campesino era sinónimo de atraso y del antiguo régimen porfirista que tenía que ser superado y desterrado. Por supuesto que no era fácil hacerlo, atrás quedaban muchos años de lucha. En los años veinte fue una etapa de buscar la unidad nacional, donde se buscaban consensos políticos para evitar la desestabilización por parte de aquellos grupos que quedaron descontentos después de la revolución armada.
Después de este periodo y pasada también la fase más cruenta de la guerra cristera, viene el periodo de la reconstrucción de las conciencias es “el momento en que se forja el imaginario social del nuevo Estado, que operará sobre nuevos sistemas simbólicos, sobre nuevos conjuntos de representaciones, sobre nuevas definiciones del mundo social” (Palacios, 1999:14) Ya no se busca ni desea cambiar por las armas la realidad del país, sino por la fuerza de la razón. Esto se buscó por medio de un intenso proceso de producción de imágenes y símbolos y la construcción de vehículos para su difusión y realización en los ambientes rurales. Eran momentos en que parecía que el futuro se podía alcanzar y los encargados de operar los cambios necesarios entre los campesinos serían los maestros rurales. Esta tarea no fue fácil pues existieron diferencias entre los mismos impulsores de estas políticas desde
Los puntos centrales del debate y discrepancia estaban en primer lugar entre posturas que planteaban “homogeneizar o diversificar, integrar o incorporar, aculturar o mantener la campesinidad” (Palacios,
El primer enfoque que podríamos llamar productivista, planteaba que los maestros tendrían que tener una orientación técnica y muy práctica, se concebía al campesino posrevolucionario con acceso a más tecnología y con unidades productivas más modernizadas. Esta postura quizás era más cercana a Narciso Bassol. Del otro lado estaba la postura llamada culturalista, quienes compartían esta visión planteaban que la estructura social del campesinado debía occidentalizarse, es decir, adquirir los valores y saberes de países hasta aquel momento muy avanzados, pero rescatando y preservando los usos y costumbres de los pueblos campesinos, con la finalidad de impulsar una cultura nacional muy fuerte. Esta postura era cercana a Moisés Sáenz, otro de los intelectuales de la educación rural posrevolucionaria. Cabe mencionar que estas posturas sólo fueron proyectos, no se logró aterrizarlas del todo porque había muchas contradicciones.
Así pues, la construcción del imaginario social en el periodo posrevolucionario y la representación del campesino (y del indígena en el contexto agrario) fue una elaboración de los grupos de intelectuales más involucrados e interesados en este proyecto: los maestros rurales y los intelectuales pedagogos. Ellos tenían un imaginario social fundado en las ideas de modernidad y progreso que debía ser trasladado a las
Los intelectuales e ideólogos del Estado posrevolucionario pretendían sembrar en los campesinos un imaginario, un modelo que debía ser la vía para fortalecer y construir el nuevo régimen. Estos ideólogos ejercían una violencia simbólica legítima que les concedía el nuevo Estado. Todas las ideas, formas, imaginario y sus aliados tenían por objeto el imponer una definición del mundo social que correspondiera a sus intereses, los cuales tenían como idea central el progreso material e ideológico de los mexicanos. Para lograr esta meta se comenzó a crear-construir un héroe que llevará hasta los últimos rincones del país este ideario y lo pusiera en práctica, este héroe era el maestro rural. Era el encargado de integrar al país al proceso modernizador. El maestro como figura prometeica que lleva el fuego a los campesinos atrasados y poseedores de una cultura localista.
La escuela rural no sólo debía enseñar a leer y escribir, sino también para liberar a los campesinos, alejarlos de la esclavitud y la humillación. Por ello Rafael Ramírez plantea En primer lugar, les hace falta una cultura general que sacuda y despierte sus inteligencias adormecidas, que los provea de los conocimientos e ideas fundamentales y les inculque ideales y aspiraciones. Esto es importante: No hay progreso posible para la sociedad de espíritu cerrado a toda luz y que viva encastillada en la torre de marfil de su ignorancia.
En segundo lugar, pedimos para el campesino una cultura industrial, que eduque su mano y desenvuelva en él la mayor suma de aptitudes constructivas. En términos generales, esta enseñanza industrial comprenderá secciones de trabajos manuales en madera y hierro, y según las localidades, trabajo de cestería, de sombrerería, de mimbre, de cerámica, etc (Ramírez, 1982:49) Pero la integración nacional no sólo implicaba integrar a los indígenas y campesinos a la cultura moderna, urbana, industrial, ni tampoco bastaba con construir caminos y la expansión de la alfabetización, sino también se debía integrar a los individuos entre ellos, la noción de trabajo grupal, apoyo mutuo, trabajo colectivo, de socialización de los conocimientos y las prácticas. (Palacios, 1999: 40). La educación debería crear un hombre libre, pero
La construcción de una cultura nacional dependía de la transformación de la cultura indocampesina, esto se lograría transformando a la materia de trabajo, los mismos campesinos. En relación a los indígenas y la necesidad de que aprendan español, Ramírez se dirige así a los maestros rurales: …cuando aprendamos un idioma nuevo vamos adquiriendo también algunas de las costumbres y formas de vida del grupo social étnico a quien pertenece aquel idioma. Así, pues, tú debes tener mucho cuidado a fin de que tus niños no solamente aprendan el idioma castellano, sino que adquieran también nuestras costumbres y formas de vida, que indudablemente son superiores a las suyas. Es necesario que sepas que los
El maestro rural sustituyó a los evangelizadores, con fe inquebrantable ante los peligros y salvadores de los campesinos. Esta idea estaría presente en la educación rural durante mucho tiempo. Para 1933 se comenzó a rumorar que los maestros que estaban saliendo de las normales rurales, sustituirían a los improvisados que habían iniciado el gran proyecto integrador de la nación. Se dio una amenaza de huelga
II.
En este apartado sólo quisiera mencionar de forma general algunos elementos que nos ayuden a entender como se dio el origen acerca de la educación socialista, muy ligada a la educación impulsada desde las escuelas rurales, de hecho existen confusiones entre enseñanza racionalista, enseñanza activa y educación socialista, algunos funcionarios como Emilio Portes Gil en 1928 utilizaba en su discurso de manera confusa escuela socialista y escuela activa (Lerner, 1982:15). Rafael Ramírez partía afirmando que la educación había sido inventada por las clases aristocráticas, pero que en la época posrevolucionaria la escuela era democrática y que tendría que tener una orientación proletaria.
…La escuela es una invención social, y no hay duda de que fue una invención de la clase privilegiada para la educación de sus hijos dentro de los sistemas de privilegios de ella. No fue una invención de la clase proletaria, que agotada por la pobreza y por la ruda labor a que estaba sometida, no tenía ni la energía mental ni el tiempo disponible para ponerse a inventar una institución que educara a sus hijos. La escuela, pues, fue desde su origen, una institución aristocrática, diríamos mejor, aunque repitiéramos, una invención burguesa o capitalista destinada a perpetuar las prerrogativas y privilegios de las clases dominadoras; una institución que trasmitía no sólo una cultura más refinada sino que propagaba también un modo aristocrático de ver el mundo y una filosofía social según la cual una clase minoritaria tiene pleno derecho a vivir a expensas de una multitud hambrienta, desarrapada e inculta (Ramírez, 1982:76-77) Al mismo tiempo Ramírez defendía un tipo de educación socialista para los pueblos socialmente atrasados, para que pudieran emanciparse y dejar de lado la servidumbre, para ello se requería una escuela que cumpliera esta misión y no podía ser otra que la escuela socialista. Lo interesante de este enfoque es que se daba una mezcla entre ideas socialistas inspiradas en la experiencia rusa, pero también se tomaban elementos de la escuela activa norteamericana, sobre todo los enfoques de John Dewey de la formación del pensamiento reflexivo que asegura la participación creativa y responsable como ciudadano (Ramírez,
Las características centrales de la educación socialista propuesta por los pedagogos posrevolucionarios eran las siguientes:
• Nacionalista, en el sentido noble de que dará a conocer y procurará hacer apreciar y estimar nuestros propios valores culturales.
• La educación socialista que a través de la escuela mexicana será igualitaria.
• La educación socialista que a través de la escuela mexicana se imparta, será tendenciosamente desfanatizante.
• La educación socialista que vamos a impartir a través de las escuelas primarias de México, será progresiva.
• La educación socialista que se imparta a través de la escuela mexicana, debía ser funcional y activa, indicando con esto que la enseñanza debe partir de las necesidades y conducir a la satisfacción de las mismas, y en donde los alumnos aprendan las cosas haciéndolas, para que sean ellos mismos los agentes de su propia educación y transformación.
Como podemos observar, todos estos intentos por inculcar un nuevo tipo de valores fundados en la idea de progreso y la acción social de los campesinos llevo a concebir un proyecto que facilitara la transformación del país mayoritariamente rural.
CONCLUSIONES
Podemos concluir que el proyecto de la escuela rural de principios de los años treinta sólo se circunscribió al orden cultural como la base para realizar la integración de los campesinos e indígenas a la sociedad nacional.
La escuela rural y su quehacer no se puede imaginar sin la participación de los intelectuales pedagogos y sus instrumentos activos, los maestros rurales campesinos, que se encargaron de trasmitir el sistema simbólico a las masas campesinas.
La revista El Maestro Rural jugó un papel central en el proyecto de integración nacional, fue la plataforma desde donde se buscó implantar las percepciones e ideas sobre el campesino y su relación con el Estado posrevolucionario.
El lenguaje que se elaboró para llevar a cabo este proyecto de nación, giro en torno a la creación de una cultura nacional que sirviera de vaso comunicante entre las capas dominantes y los sectores subalternos, en este caso los campesinos e indígenas.
La construcción de una representación posrevolucionaria de campesino y del problema campesino, fue parte central de la definición de todo el proyecto de nación, que tenía que ser aceptado por las masas campesinas, ya que con el diagnóstico elaborado por los intelectuales y pedagogos de
El enseñar a leer a los campesinos tuvo como objetivo principal la formación de la cultura nacional, estaba basado en dispositivos de interpretación, explicación y traducción, para poder incluir a los campesinos en el proyecto cultural de la revolución.
Estos intentos de integración de los campesinos e indígenas en el proyecto revolucionario fue abandonado por el presidente Cárdenas en 1936, al destinar la revista El Maestro Rural sólo para ser distribuida entre los profesores y ya no para los campesinos en general, así se iniciaría otro proyecto con otros actores y otras miradas.
BIBLIOGRAFIA
Lerner Victoria (1982) La educación socialista, COLMEX. México.
Palacios Guillermo (1999) La pluma y el arado, COLMEX-CIDE, México.
Ramírez Rafael (1982) La escuela rural mexicana, SEP/80, México.
viernes, 12 de septiembre de 2008
ARTÍCULO: ¿Seguridad pública en Puebla?
ASí EN
Jorge G. López Pérez
Estudiante de
Si bien se percibía la total seguridad en el Estado de Puebla, ahora esa realidad se ha convertido en una aspiración, en un deseo y en un anhelo de todos los poblanos, como cualquier ser humano –pero con buena voluntad- se identifican con la paz, la tranquilidad y la serenidad.
Es comprensible los efectos de la lucha emprendida por el gobierno federal en contra del crimen organizado en los Estados de Sinaloa, Sonora, Tamaulipas, Veracruz, Tabasco, Michoacán, Nuevo León, Aguascalientes, Jalisco, Chihuahua, Yucatán, Durango, Quintana Roo, D.F., Guerrero y Baja California que luchan de una manera sangrienta y descarnada entre sicarios y
Sin embargo, a causa de este efecto, a llevado a la dispersión temporal-espacial de cualquier organización criminal –ya sea secuestradores o narcotraficantes-, es decir, estos grupos delictivos se estarán dispersando en otras entidades fértiles del país como Puebla, Tlaxcala e Hidalgo con características de un paraíso apacible y seguro, y un verdadero baladí para los narcotraficantes –hablando propiamente desde la postura subjetiva de los habitantes de estas respectivas ciudades seguras y desde el ángulo de los narcotraficantes-, buscando en esos lugares característico del cielo dos cosas: a)un nuevo mercado (consumidores y mediadores) y posteriormente ser el lugar perfecto para distribuir los estupefacientes a la zona del bajío, del norte (fronterizo) y de la zona del pacifico y del golfo del país y b) establecer principalmente en la sierra norte (compartido entre las entidades federativas de Hidalgo, Veracruz y Puebla) un laboratorio para la elaboración de drogas sintéticas.
Ante esta posibilidad única y cercana –apertura a la realidad-, es inconcebible para los poblanos que el gobierno del Estado de Puebla, aún siga en su letargo de anunciar en los medios de comunicación electrónicos e impresos sus productos –obras por aquí y obras por allá, aparentando ayudar a la gente de la sierra negra, norte y mixteca- y no este verdaderamente tomando las medidas pertinentes para la prevención de la llegada de los grupos delictivos a Puebla.
¿Llegada de los grupos delictivos (narcotraficantes o secuestradores) a Puebla? ¿Acaso en Puebla no se cometen delitos? Al contrario, Puebla se ha cometido y aún se comete cualquier tipo de delito, desde el nivel administrativo, pasando por el delito de la corrupción –cabe recordar el delito de Mario Marín sobre la periodista Lydia Cacho-, el delito de narcomenudista hasta el delito la complicidad del gobierno del estado a un narco-alcalde de Izùcar de Matamoros: Rubén Gil Campos (hoy preso en Los Ángeles, California).
Como podemos ver, en la imaginación de la ciudadanía poblana –y de los ciudadanos de otros Estados que todavía no los alcanza el índice indicado por el gobierno federal para declarar como zona conflictiva-peligrosa- se están construyendo esos imaginarios (ajenos al) en el cielo [2](lugar: Puebla, Tlaxcala, Hidalgo o/y Querétaro), es decir esos imaginarios se están construyendo a partir de la cotidianidad[3], de los discursos dominantes provenientes de los medios de comunicación, gobierno y delincuentes,-en su totalidad como la realidad-.
Acontecimientos ocurridos en los últimos meses en Puebla como: Pretendían el Cártel de Sinaloa utilizar el aeropuerto internacional Hermanos Serdán de como narco–pista[4], Abandonan en Chichiquila avioneta con cartuchos para rifle R15[5] y entre otros acontecimientos; son señales, son manifestaciones de la ruptura/crisis de la duración de la tranquilidad y la serenidad así en la tierra como el cielo.
Septiembre 2008.
Batopilas, Chihuahua.
Notas
[1] “Se reacomodan cárteles: el del Golfo, el más violento; pierde fuerza el de Sinaloa”, en
[2] Hablando y conceptualizando desde la óptica de la sociología de las religiones.
[3] Véase en Nancy A. Ortiz el ensayo: “Lo Imaginario Como Parte De Nuestra Cotidianidad. Análisis De “El Principito” De Antoine de Saint Exupèry”, en: http://actoressociales.blogspot.com/search?q=lo+imaginario+como+parte+de+nuestra+cotidianidad
[4]“Pretendían el Cártel de Sinaloa utilizar el Aeropuerto Internacional Hermanos Serdán como narco-pista”, en
[5]“Abandonan en Chichiquila avioneta con cartuchos para rifle R15” en
domingo, 7 de septiembre de 2008
FORO sobre la despenalización del Aborto
El Aborto: una opción legal
La despenalización del aborto es una realidad en la ciudad de México, pero no en el resto de las ciudades de la república mexicana, la propuesta se esta tratando de llevar a los congresos de diferentes estados, tal es el caso de Veracruz. La voces en contra y a favor no se han dejado de escuchar. Actores Sociales abre un espacio al dialogo y discusión del tema. Opinen sobre los pros y contras de esta medida.
lunes, 1 de septiembre de 2008
ENTREVISTA a Carlos Antonio Aguirre Rojas
Historia a contra pelo
por Gualberto Díaz González
sociólogo, profesor de
Historia a contrapelo
Entrevista a Carlos Antonio Aguirre Rojas
El movimiento zapatista mexicano se inscribe en las luchas de larga duración, pero ¿de qué manera podríamos visualizar el movimiento actualmente?
Creo que es una pregunta fundamental, porque el neozapatismo mexicano forma parte de una familia de nuevos movimientos antisistémicos radicales que pueblan hoy la geografía de América Latina. Vale subrayar una cosa, hoy América Latina se encuentra en el frente de vanguardia de las luchas antisistémicas de todo el planeta. Qué quiere decir esto, que las luchas más avanzadas en términos de organización, demandas, discursos, estrategias políticas, se están desarrollando en el semicontinente Latinoamericano. Para ubicarlo en perspectiva, diríamos que el frente de vanguardia de la revolución mundial en 1920 estaba ubicado en
¿Cómo podríamos representar el impacto de la lucha zapatista a 14 años de su levantamiento armado? ¿Como podríamos ver su vigencia?
No hay duda que en México la caída del PRI, el régimen de partido de Estado que duró 71 años en el poder, se la debemos a la irrupción neozapatista. No fue en realidad el PAN quien derrotó al PRI en el año 2000, tampoco fue el PRD, sino el conjunto de consecuencias políticas de la población mexicana, contradicciones sociales generadas a partir del neozapatismo, determinó el desmantelamiento de las bases del régimen de partido único y abrió espacios. Pero desde el año 2000 los gobiernos del PAN han sido tan corruptos y neoliberales como los del PRI.
Los movimientos indígenas en Perú, Colombia, Ecuador, Bolivia, existían antes del primero de enero de 1994, pero tenían en general una posición defensiva y una proyección local; en cambio, justo a partir de que los zapatistas se levantan, replantean el papel de los pueblos indígenas no solo en México sino en el mundo. A partir de 1994
También habría que abonarle al neozapatismo el hecho de generar una especie de modelo universal de funcionamiento para los nuevos movimientos antisistémicos, en términos organizativos, discursivos y de estrategias. El movimiento más avanzado hoy en Brasil son los Sin Tierra; en Argentina es el movimiento de los sin trabajo; y los indígenas mexicanos se han definido como un movimiento de campesinos, los sin ciudadanía, sin derechos, sin reconocimiento de su identidad. ¿Por qué subrayo esto? Porque ahora la protesta social no está viniendo de los centros del sistema, sino de sus márgenes; la gente que está siendo excluida por las políticas neoliberales, la gente que este capitalismo en su fase terminal desecha, es la que ahora se organiza para impugnar. ¿Quiénes están creando uno de los movimientos catalizadores y fundamentales en Estados Unidos? Los migrantes, los que no tienen reconocimiento, los sin ciudadanía y sin derechos en Norteamérica. ¿Quién está siendo un catalizador fundamental en Europa? Los habitantes de los suburbios parisinos, que estuvieron a punto de convertirse en un movimiento europeo; son los sin reconocimiento por razones de racismo, los excluidos del espacio de la sociedad francesa y de la sociedad europea, quienes están funcionando también como un modelo organizativo, de modos de relacionarse con la sociedad civil.
El zapatismo se plantea preguntas de carácter universal, desde la perspectiva de Immanuel Wallerstein, por lo que exige respuestas universales, o ¿por qué ha impactado el zapatismo en varias regiones del planeta, cómo se vincula con las demás luchas, por qué en Europa lo miran como vanguardia?
Debemos preguntarnos que luchas sociales, movimientos de protesta, ha habido pocos a todo lo largo y ancho de la historia, pero ¿por qué ciertos movimientos alcanzan una difusión mucho más amplia en la opinión mundial, con repercusiones que trascienden su ámbito local? Wallerstein pone tres ejemplos en el siglo XX: el movimiento de Gandhi en
Hablemos ahora de
La iniciativa de
Si los indígenas neozapatistas fueran egoístas podrían haber dicho: en Chiapas tenemos una presencia social indudable, una fuerza y un poder real, podemos vivir así quince, veinte, treinta, cincuenta, doscientos años y nos olvidamos del país, pero
La opinión que se ha estado difundiendo en los medios de comunicación en general, de que
Cuando los zapatistas se preocupan por el conjunto del país y no solamente por su localidad, de la misma manera se están preocupando por el mundo entero, porque saben que una parte no se puede cambiar si no se cambia el todo, ¿es la cuestión de los sistemas-mundo a lo que se refiere Wallerstein?
Claro, esta observación es muy importante. Ellos dicen: por el momento
Qué pasa en el escenario político actual, en relación con la demanda de que Pemex no se debe privatizar: ¿existe un movimiento social en la defensa de Pemex o es una movilización coyuntural?; ¿cómo podíamos distinguir estos dos términos que muchas veces se confunden y se malinterpretan?
Cuando hablamos de movimientos sociales se confunden muchas cosas y creo que Inmmanuel Wallerstein ha tratado de aclarar esto, pero no solamente él. Una movilización social tiene un objetivo limitado y puntual, a diferencia de lo que es un movimiento organizado, estructurado, con objetivos inmediatos y mediatos, que eventualmente pueden coincidir con los de una movilización, pero tiene objetivos de mediano y largo plazo. En ese sentido, creo que el movimiento que Andrés Manuel López Obrador está tratando de gestar es más bien una movilización en defensa del petróleo. Estuve en otra entrevista y me preguntaban esto y creo que cualquier mexicano bien nacido se opone a estos procesos neolibelares de privatizar Pemex, pero desde
El movimiento de López obrador ha encauzado los sentimientos de agravio acumulados históricamente en los mexicanos, los ha encauzado justamente para quitarle el detonador a la granada, es decir, para mediatizar. ¿López obrador de ninguna manera pretende un cambio a la manera de los zapatistas?
Aquí hay que recordar una cosa: López Obrador cuando fue entrevistado y le preguntaron: ¿que cosa es lo que usted quiere hacer?, respondía claramente: “yo no voy a alterar los equilibrios macroeconómicos de nuestro país”. ¿Qué quiere decir no alterar los equilibrios macroeconómicos? Quería decir que no iba a romper con las políticas neoliberales que hemos estado padeciendo los últimos veinte años. Y hay que decir entre paréntesis, él mismo estaba bastante atrasado al respecto, porque ahora el presidente del Banco Mundial y el vicepresidente del Fondo Monetario Internacional están criticando el neoliberalismo al decir que sus políticas quizá no fueron tan buenas, que crearon demasiada pobreza, que acentúan el conflicto social.
Y el propio López obrador ha sido el primero que ha matado la posibilidad de convertir la movilización que hubo en contra del fraude electoral en un verdadero movimiento, porque la gente en el fondo se ha desilusionado mucho. La gente frente al fraude electoral estaba dispuesta, y lo decían sus propios asesores que llegaron a plantear a López obrador: “cerremos la ciudad de México”. Y la ciudad de México es muy fácil de paralizar porque está conectada con el resto del país solo por cinco carreteras. ¿Cuántas personas se necesitan para bloquear una carretera? Como nos lo enseñan los piqueteros argentinos y los indígenas colombianos, con tres mil personas tú paras una carretera y no pasa nadie. Claro, les mandan al ejército, pero los piqueteros no son tontos, cuando el ejército y la policía llegan, se repliegan y lo único que hacen es montar otra vez el piquete un kilómetro atrás, y si les mandan a la policía un kilómetro atrás se repliegan otro kilómetro y les mandan otra vez pero para eso ya dieron la vuelta y por detrás del ejército vuelven a instaurar el piquete. Eso se podría hacer muy fácil en México, bastarían 5 mil gentes para cada una de las carreteras; con 25 mil personas se puede paralizar el funcionamiento de la ciudad de México, y si hubiesen hecho eso habrían obligado a que se revisara voto por voto y casilla por casilla. Pero el propio López obrador no quiso: “no, no queremos derramamiento de sangre”, dijo.
También López Obrador se ha rodeado de una cantidad de personas que no tienen la menor credibilidad. Recuerdo cuando el desafuero, el orador era Porfirio Muñoz Ledo, la gente empezó a chiflar y a criticar y no lo dejaron hablar y Muños Ledo que llevaba preparado un discurso de 15 minutos tuvo que hablar 3 y callarse. Si la gente que rodea a López Obrador es Porfirio Muñoz Ledo y Manuel Camacho y Socorro Díaz y Jesús Ortega, ¿quién va a querer poner las manos de este país en ese grupo de gentes sin credibilidad política?
Se ha hablado mucho sobre la desvinculación de los problemas sociales con lo que se enseña en las aulas: lo que pasa en la calle y lo que se ve en clases. ¿A qué se debe esta desvinculación?.
Creo que el problema se inscribe en un horizonte más general y que Immanuel Wallerstein ha tratado de desarrollar: la crisis terminal del capitalismo. ¿Qué es lo que ha sucedido? Todos los estados en el mundo viven esto que los economistas llaman la crisis fiscal de los estados; porque ahora tienen menos recursos para atender sus tareas históricas: la seguridad como el monopolio de la violencia (pacificar y asegurar); la salud y la educación pública. Pero la educación y las universidades están en una crisis terrible porque cada vez más el Estado no las provee de recursos para que funcionen normalmente. Y si le sumamos a esto los procesos de privatización de la educación a nivel universitario... la universidad privada está peor, porque sigue una lógica de lucro, se venden los títulos como papeles al mejor postor.
¿Pero la universidad pública por que está en crisis? Además de que le recortan recursos al mismo tiempo se masifica, la demanda crece cuando la oferta disminuye, entonces un profesor que antes le daba clases a quince o a veinte estudiantes, y que podía tutorearlos en el buen sentido, podía con cada uno de ellos tener asesoráis, sugerir bibliografía, reunirse y apoyar a los que estuvieran atrasados; pero eso deja de ser posible cuando el mismo profesor en vez de dar clases a dos grupos, tiene que dar a cuatro, luego a seis y luego a ocho. y cuando sus grupos pasan de ser de veinte a cuarenta, a cincuenta, a setenta... Es lo que ha pasado en todas las universidades del mundo. Además los profesores tienen salarios muy bajos que no les alcanza, por lo que tienen que dar clases en dos universidades, en una pública y en una privada, o buscarse otros empleos para completar.
Es una catástrofe si a eso le sumamos las políticas perversas que el Estado mexicano está siguiendo en los niveles preuniversitarios. Hay que denunciarlo… me quedé impactado de que alumnos míos que estudiaron la carrera de historia ahora sean profesores en secundaria o en preparatoria de ciencias sociales y dicen que el Estado mexicano ha dicho que un profesor de cualquier materia no puede reprobar a mas del 5% de su grupo; si tiene 20 estudiantes tiene que pasar a 19 y, como una ley, solo puede reprobar 1. ¿Qué es lo que esto provoca? Que los niños pasan sin saber escribir bien, no saben leer un texto en el sentido de comprender lo que el texto está diciendo, no saben bien matemáticas, no saben bien geografía, no saben bien historia y, como se vuelve un régimen de simulación, entonces los niños llegan a primaria, a secundaria, a preparatoria y a la universidad sin tener una formación sólida, y no es culpa de ellos, es culpa de
¿De ahí la desvinculación de lo que el alumno recibe en la universidad con lo que está pasando en su entorno?
Claro, lo que está pasando en las universidades es una pérdida del sentido crítico, los estudiantes si a duras penas están mal aprendiendo las cosas, difícilmente pueden decir: los conocimientos que yo he adquirido en la universidad puedo retribuírselos a la propia sociedad ayudando a entender los problemas sociales que se viven. Aunque debo aclarar un punto, a pesar de todo los estudiantes mexicanos se mueven, no gracias a las universidades sino a veces a pesar de ellas, y tienen esa ansia de saber, se meten a Internet, se vinculan con algunos profesores (porque felizmente los sigue habiendo que, contra viento y marea, siguen introduciendo perspectivas críticas) y tratan de irse de viaje en plan de mochileros a Estados Unidos o se van a recorrer Guatemala y Centroamérica o de repente se suben en un barco y trabajando en él llegan a Europa y se pasan un año y vuelven y esos estudiantes son los que más iniciativa tienen, curiosamente, los que están vinculados a movimientos sociales, que de repente van a los Caracoles zapatistas, participan en
Hay un silencio mediático sobre lo que está pasando hoy en Chiapas, ¿cómo podemos contrarrestar esto nosotros como ciudadanos de a pie, como profesores universitarios? ¿Existe realmente una sociedad civil que pueda preocuparse por lo que está pasando en Chiapas?
Creo que sí existe una sociedad civil nacional e internacional, pero justo como lo han dicho los propios neozapatistas, un poco en tono de broma, de que la sociedad civil mexicana es esa especie de señora medio caprichosa de comportamiento imprevisible. No me cabe la menor duda que fue la sociedad civil mexicana la que paró la masacre en Chiapas el 12 de enero de 1994, cuando fuimos un millón y medio de personas y llenamos el zócalo y dijimos no a la guerra y forzamos a Carlos Salinas de Gortari a declarar la tregua y a abrir el espacio de los diálogos de San Cristóbal; cuando la sociedad civil acompañó la marcha del Color de
Y lo que se puede hacer contra el silencio mediático es denunciar en todos los foros que nos sea posible. Si somos periodistas de radio o escribimos, debemos denunciar esta situación: que la llamaba guerra de baja intensidad se está volviendo una guerra no declarada públicamente pero en acto en contra de las comunidades zapatistas. Y en segundo lugar, salir a la calle y protestar para denunciar el riesgo creciente de una salida militar al conflicto y, debemos insistir en esto, la peor de las salidas al conflicto en Chiapas es la militar, pero desafortunadamente parecer ser que el grupo de Felipe Calderón está acariciando la tentación de tomar esa salida.
Llama la atención un hecho: desde que Felipe Calderón tomó posesión como presidente de México nunca ha hecho una declaración pública sobre Chiapas, nunca ha dicho cual es su posición. Porque Vicente Fox decía tonterías: “voy a resolver el conflicto en 15 minutos” y después permitió que