Mostrando las entradas con la etiqueta viajes. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta viajes. Mostrar todas las entradas

martes, 8 de septiembre de 2009

CRÓNICA de Viaje a bahías de Huatulco

Viajando al Pacífico

Por Nancy Ortiz


Para mi hermanito Alecs, que se dejó pervertir


Para viajar hacía las Bahías de Huatulco uno tiene que manejar a través de una carretera donde predominan las curvas. El paisaje es solitario, árido y pobre. Cuando aparece la desviación hacía las bahías, parece como si entráramos a otro país como bien lo expreso nuestro buen amigo neerlandés.

De repente el paisaje cambia, deja de haber aridez. La pobreza termina para dar paso a bulevares con pasto, plantas y árboles bien regados. Lujosos hoteles y restaurantes aparecen frente a nosotros, claro, no podemos ver el mar, las playas son privadas y sólo se puede llegar a ellas a través de los hoteles.



La primera parada la hicimos en un pueblo que se llama la crucecita. Ese pueblo tiene alrededor de 20 años de fundación, se creó cuando a Miguel de la Madrid se le ocurrió que los terrenos cerca de las bahías debían pertenecer a mexicanos ricos y no a oaxaqueños pobres. En ese sexenio se dio la expropiación de muchas tierras, muchas de ellas a la fuerza y con violencia. Pues los ejidatarios que se negaban a vender sus tierras eran encarcelados, golpeados y amedrentados. El gobierno una vez más gano la batalla, la gente vendió, el gobierno les construyó la crucecita y ahora los terrenos frente al mar pertenecen a lujosos consorcios hoteleros con playas privadas o a personas con mucho dinero que pueden pagar una casa de verano a la orilla de las bahías.

Pese a esto, los lugareños son optimistas y dicen que por lo menos ahora pueden vivir del turismo. Están tan organizados que venden hasta lo que uno no sabía que podía necesitar.

La crucecita es un pequeño pero bonito pueblo turístico. Hay servicios de todo tipo y todos los precios, aunque en general los servicios se caracterizan por ser un poco caros.

En el pueblo la gente te ofrece paquetes para viajar en lancha o yate, los precios van desde los $250 por persona hasta los $5000. Tomar el viaje resulta divertido, pues en las bahías hay arrecifes de corar rayas o tortugas marinas gigantes que a veces salen a saludar a los viajeros. También puedes pescar en alta mar y visitar todas las bahías de la zona.

Otras de las actividades favoritas es snorquelear en los arrecifes, la experiencias puedes ser fascinante o aterradora para aquellos que no conviven mucho con la naturaleza.


Segunda parada Puerto Escondido

Podría pasar el resto de mi vida sin volver a ir a Puerto Escondido y no lo lamentaría. Aunque la playa es bonita no es apta para nadar, está bien para los chicos surfistas y para los adolescentes reventados. El pequeño pueblo se empieza a llenar de vida a partir de las 3 de la tarde, cuando los turistas se van levantando del desvelo de la noche anterior. Sólo se paran temprano los interesados en el surf. La vida nocturna es alocada y más en temporada alta. Los jóvenes pasean ebrios y drogados por doquier. Hay ambiente en muchos de los antros del lugar aunque también hay gente tirada y uno no sabe si llamar a una ambulancia o pasarle una cobija, si está muerto o sólo está hasta el tope de cerveza.

Puerto Escondido es altamente recomendable para jóvenes que gustan del regue, surf, sexo, mota y alcohol al mismo tiempo y en un ambiente alocado. Habrá otros que gusten de las mismas cosas pero en ambientes más acogedores. Ah por cierto, los servicios en Puerto también pueden llegar a ser muy caros.


Tercera parada Mazunte



Mazunte es la onda. El oleaje es muy fuerte pero menos agresivo que en puerto escondido, uno puede nadar un poco más. Aunque les aconsejo utilizar traje de baño bien ajustado o de una sola pieza para evitar perdidas de algunas de ellas. Claro, si pierden algunas de las piezas de su bikini no pasa nada, pues en esa zona están acostumbrados a los desnudos totales y parciales.

Las olas son tan furiosas que Incluso estando sentada en la orilla uno no se escapa de las fuertes olas, estas pueden llegar incluso por detrás (aun no entiendo como sucedió) y revolcarte unos cuantos metros como nos sucedió a Evelyn, Mely y a mi. Aunque para ser sincera las tres estábamos más preocupadas en no perder el bikini que en morir ahogadas, ya saben, muertas pero vestidas.

He de confesar que utilizar bikini de dos piezas no es muy funcional cuando uno quiere realizar actividades con un poco de movimiento, en más de una ocasión he estado apunto de perder alguna de las piezas. Una de las peores veces fue en Monte pio cuando iba colgada de una babana y tuve que soltarme para ir al rescate de una parte de mi traje de baño. En otra ocasión, cuando me metí a una cascada y salí revolcada entre piedras, lo menos que me paso fue perder mis sandalias, salir con moretones y raspones. Y la ultima vez en Mazunte al ser revolcada varias veces por las gigantescas olas. Eso sí, revolcada pero exfoliada.



En el pacifico, la arena es más clara y el paisaje del mar es muy bonito, pues se alzan peñascos a la orilla de la playa lo que le da una composición muy especial.

La comida de mazunte resulta ser alternativa y rica. La onda ahí también es el surf, el regue, la mota y el alcohol, todo esto en un ambiente mucho más relax.

Las cabañas y habitaciones están mejor acondicionadas y más económicas que en Puerto Escondido. El lugar está lleno de extranjeros europeos y gente altermundista. También hay muchos jóvenes que dejaron de ser adolescentes.

En el pueblo hay una tienda de productos de belleza naturista conformada por una cooperativa de mujeres oaxaqueñas. Los productos son relativamente económicos y pueden ser muy buen obsequio para regalar.

La zona en general, resulta ser un complejo turístico muy bello. Lamentablemente las grandes ganancias, como siempre, sólo le pertenecen a unos cuantos.

domingo, 15 de febrero de 2009

CRÓNICA de Viaje a Italia III


Fin del recorrido

Por Nancy Ortiz


San Benedetto del Tronto

Es una pequeña ciudad que se encuentra en la costa este de Italia y en la parte central de la península. Lugar visitado principalmente por turismo nacional. San Benedetto se encuentra aproximadamente a 3 horas y media de Roma en autobús.

Éste pequeño pueblo comparte el mar Adriático frente a Croacia, por tal motivo tiene un ligero oleaje. La playa de San Benedetto es preciosa, el agua es limpia y tranquila. La mayor parte de la costa es privada. Hay rentas de sombrillas hasta por 500 euros por mes. Las italiana no suelen tener problemas en mostrar su bella figura y andar en toples. Todo sea por conseguir el bronceado perfecto.

La pequeña ciudad ofrece mucha vida nocturna, hay bares frente a la playa que dedican días exclusivos para escuchar y bailar música latinoameriana. En los bares sirven de botana unos caracoles en su caparazón bañados en salsa de tomate. El chiste consiste en estar chupando los caracoles y sacar la poca carne con un palillo, la experiencia resulta más chistosa que deliciosa. También es común que los jóvenes se reúnan a comer frutas tropicales como la sandia o cocos. En contraste con la creencia popular en Veracruz de que comer Sandía de noche hace daño o comerla borracho puede ocasionar la muerte, allá la comen en la madrugada y andando ebrios. Una rebanada de sandía puede costar hasta dos euros y una rebanadita de coco hasta uno.



En verano hay festividades típicas del pueblo que la gente celebra con grandes fiestas populares, bailes, comida gratis y fuegos pirotécnicos alrededor de la playa. Los lugareños se engalanan y reúnen a ver el espectáculo que dura alrededor de una hora. Pareciera que todo es motivo de fiesta.

A una hora en auto de San Benedetto hay típicas montañas italianas y ríos que los italianos los convirtieron en lagos. Los “lagos artificiales” tienen un raro color azul que parecieran estar pintados, sin embargo son bellos para contemplar y pasar un día de campo. Algunos jóvenes acampan otros los utilizan para tener contacto con la naturaleza. El clima en San Benedetto es extremo, en invierno nieva y en verano hace mucho calor.



Firenze

Muchos europeos me hablaron de lo romántica y culta que era Florencia como le llamamos los mexicanos. Tenían razón. Ahí se desarrolló el renacimiento. En Firenze floreció el arte, la literatura y la ciencia del siglo XIV al XVI. Algunos de los artistas más importantes que dio Italia trabajaron ahí, tal es el caso de Leonardo Da Vinci, incluso el famoso retrato de la Gioconda, tiene como fondo los puentes de Florencia. Otros de los famosos que tuvieron que ver con esa ciudad fueron Botticelli, Miguel Ángel, Maquiavelo y Dante entre muchos.



En la Galería de la Academia de Florencia se encuentra el famoso David de Miguel Ángel. Esta escultura mide 4 metros y 9 centímetros. La historia cuenta que era un pedazo de mármol abandonado 40 años a la intemperie y que Miguel Ángel en 1501 a sus 24 años y gracias a sus conocimientos de escultura y anatomía logró esta magnifica obra. Una amiga me dijo, “si vas a Florencia ve a ver al David, en realidad te va a impresionar” y lo hizo, no pensé que fuera tan espectacular. La obra es tan perfecta que uno se encuentra ante un gigante de mármol con detalles asombrosos, uno puede pasar horas contemplando la perfección. Merece mucho la pena visitarlo en caso de pasar por ahí.

El centro de Florencia también fue declarado patrimonio de la humanidad, es una de las ciudades más visitadas y caras de Italia, sin duda es una de las más bellas. En la ciudad hay museos, basílicas, esculturas, puentes, en fin, todo el arte congregado en un sólo lugar.

En Florencia nos tocó una feria popular cuya entrada era gratis y se parecía un poco a las ferias que hacemos por estos lares, con mucha música, comida, vino, jolgorio y gente de muchas partes del mundo.

Para los Italianos son las motos lo que para los holandeses son las bicicletas. Florencia es la típica ciudad Italiana con sus puentes, callejones y viejitas motorizadas.



Venecia

Venecia es una ciudad compuesta por 120 pequeñas islas, las cuales están conectadas por 400 puentes. El medio de transporte son lanchas que la hacen de taxis y ferris. Los chicos allá en vez de tener auto tienen lancha. Las famosas góndolas son para los turistas, un paseo en góndola con el típico Italiano vestido en playera de rayas y cantando opera cuesta alrededor de 100 euros. Demasiado caro para mi gusto si tomamos en cuenta que una góndola es muy parecida a los cayucos que hay en Tabasco y que son mucho más baratos; claro, no ofrecen el espectáculo del Italiano cantando opera.

Una de las fiestas más populares en Venecia es el carnaval de mascaras. Hay a la venta en infinidad de colores, formas, materiales y precios.

Venecia en un tiempo fue considerada uno de los puntos más importantes para el comercio, hasta la actualidad se vende y exporta mucho murano de todas las formas y tamaños posibles, al igual que telas, corbatas, alta costura, accesorios de belleza y demás.



La plaza de San Marcos, es considerada por muchos como la plaza más bella de Europa. Venecia es una de las ciudades más visitadas por los turistas, sin embargo hay pocas cosas que hacer ahí, yo diría que Venecia es linda para ver más no para vivir. El lugar es romántico sin embargo no es nada tranquilo, la plaza más hermosa de Europa alberga tanta gente y palomas que apenas se puede caminar. Pero, si van a Italia, es imperdonable no visitar Venecia.

Al parecer Italia sí es uno de los mejores países del mundo como aseguran los italianos. La comida es riquísima, las mujeres son bellísimas, los lugares son increíbles y parece ser que hasta tienen buen fútbol.


Foto: Nancy Ortiz

miércoles, 11 de febrero de 2009

CRÓNICA de Viaje a Italia II




Iniciando el viaje en Italia

Nancy Ortiz


Viajar en avión por toda la Unión Europea puede ser relativamente barato. Hay vuelos muy económicos si compras con anticipación, eso sí, no son aviones de lujo, ni siquiera los lugares están numerados, ni hay una azafata ofreciéndote bocadillos a cada rato, normalmente suelen salir de aeropuertos alejados y uno debe estar muy pendiente del horario y lugar por donde sale el vuelo. Al final resulta toda una aventura que vale la pena, pues el ahorro puede ser considerable.

Estaba en Francia cuando abordé un avión rumbo a Italia, toda la gente subió muy contenta hablando francés, pero al bajar todos lo hicieron hablando italiano. Eso me asombra de los europeos en general, casi todos hablan más de un idioma y cambian de idioma con mucha facilidad, tanto que en una comida se puede hablar hasta cinco idiomas diferentes, dependiendo las nacionalidades que en ese momento estén conviviendo. Bueno, esta generalidad no es precisamente una característica típica de los italianos, pues a ellos les encanta tanto su idioma que no ven la necesidad de aprender otro. Son pocos los italianos que se aventuran al aprendizaje de varios idiomas.


Milán

En Milán estuve sólo un día, pude ver la reparación del Duomo di Milano que es una catedral gótica, la segunda más grande del mundo. Estando en Milán (como típico turista) caminé por esas tiendas de grandes diseñadores donde una bolsa de la marca Louis Vuitton puede costar hasta 3000 euros, (no creo en Dios, pero sin lugar a duda comprar una bolsa de ese precio debe ser pecado). Cabe mencionar que la gente más compradora son los asiáticos, principalmente japoneses, ellos son los que invaden esas tiendas y consumen sin pensar lo que ahí les ofrecen. Es curiosos además observar que a dos cuadras de ahí hay replicas de esos productos muy por debajo del costo original, los ofrecen vendedores ambulantes normalmente inmigrantes de origen africano, pero no son “ambulantes establecidos” como los hay en México, estos realmente tienen que andar sorteando a la policía para poder vender.


Roma

Lo primero que vi en Roma fue la estación de trenes y como es de suponerse no es la cosa más bella del mundo, sobre todo porque la gente nos había dicho que Roma era un poco peligrosa. Evelyn (la amiga con quien viajaba) y yo llegamos a la ciudad de noche, no teníamos reservación en ningún hotel, así que nos dimos a la tarea de andar buscando hoteles a esa hora, caminando y cargando unas maletas que pesaban como una tonelada de piedras (ya se que es lo mismo decir una tonelada de piedras que de algodón pero el uso de la hipérbole es para imprimir mayor dramatismo al relato).

En Roma nos quedamos en un hostal. La experiencia no fue muy grata, hay mucho ruido, hay que pelear por la comida, por el baño y hasta por las camas. Lo mejor que nos pasó ahí fue conocer a unas catalanas con las cuales coincidimos en varias cosas, una de ellas fue que el ex presidente Fox era un idiota y otra lo incomodas que resultan ser las maletas de alpinista, sobre todo después de ir de compras en las rebajas de verano. Tanto ellas como nosotras maldecíamos a nuestros novios y amigos que nos las habían aconsejado y hasta prestado. Lamentábamos juntas no haber llevado la maleta de rueditas, a la que, por cierto, le cabían mucho más compras.

No pensé que Roma me fuera a cautivar tanto, antes Roma sólo me remitía al aspecto religioso, sin tomar en cuenta que ahí surgió casi toda la cultura occidental. Esta ciudad fue declarada patrimonio de la humanidad en 1980, hay monumentos milenarios como el Coliseo, considerado actualmente una de las maravillas del mundo.


Otra de los grandes atractivos de Roma es la plaza de San pedro en el Vaticano, es simplemente majestuosa. En verano Europa se llena de turistas, hay que hacer grandes filas para entrar a todos los atractivos, la basílica no es la excepción, para poder entrar hay que ir vestidos lo suficientemente recatados, de lo contrario te negarán el acceso.

La arquitectura de la ciudad es barroca y renacentista, para los extranjeros es particularmente bella, para los romanos acostumbrados a ella les parece un poco pasada de moda.

Otro de los muchos atractivos es La Fontana di Trevi, que es la fuente barroca más grande de Roma. Hay una costumbre entre los extranjeros en arrojar monedas a la fuente con la mano derecha sobre el hombro izquierdo, quien lo hace asegura su retorno a Roma. Aunque la costumbre surge a partir de una película en 1954 se ha vuelto tan popular que el fondo de la fuente esta repleto de monedas, quien avienta dos monedas se enamorará de un romano(a) y el que avienta tres se casará con él (ella). Supongo que hay quienes avientan el monedero completo por lo que se ofrezca.

En Roma viajamos gratis sin querer. La primera vez nos subimos a un autobús que tenía un letrero que no vimos pero decía en ingles e italiano “no suba si no tiene boleto”. Por la costumbre de pagar a los microbuseros quisimos hacer lo mismo y nos llevamos tremendo chasco. No nos bajaron porque los autobuses no pueden hacer parada donde sea y los choferes no son tan iracundos como los mexicanos. Después, compramos en una maquina y nos dio unos expirados, cada vez que subíamos a un autobús y checabamos nuestros boletos se prendía una luz roja que emitía un sonido como de alarma. De esa manera, todos los pasajeros se daban cuenta que nuestros boletos eran un fiasco y estábamos viajando literalmente sin pagar. Lo hicimos varias veces hasta que nos dimos cuenta que esa luz roja no era normal. Cuando quisimos comprar boletos que sirvieran, las tabaquerias (lugares donde los venden) estaban cerradas. Así, que una vez más tuvimos que subirnos sin un boleto normal a un autobús, pero esta vez deliberadamente. Ese chiste nos pudo costar una multa de 50 euros.

Sin temor a equivocarme puedo decir que Roma es una de las ciudades más bellas donde he estado. Sólo espero que la moneda en la Fontana di Trevi haga lo suyo y pueda volver a esa hermosa ciudad.

continuará...

Foto: Nancy Ortiz

sábado, 7 de febrero de 2009

CRÓNICA de Viaje a Italia I



La Bella Italia

Nancy Ortiz

Observaciones mexicanas

Italia es el mejor país aseguran los italianos, tiene la mejor comida, los mejores lugares, las mejores mujeres y hasta el mejor fútbol, argumentan. Puede que tengan razón, la comida no se si sea la mejor comida del mundo, pero es deliciosa, no sólo se reduce a pastas o pizzas como creemos la mayoría de nosotros, también tienen dentro de sus mejores platillos el consumo de carnes y mariscos. En Firenze (Florencia) se hace una carne en su jugo que el tipo de preparación es muy parecido a los cortes argentinos, el platillo resulta ser tan rico como caro. Los Gelatos (helados) son una cosa exquisita, esos sí son los mejores que he probado en toda mi vida, hay una infinidad de sabores, desde los más usuales hasta los más exóticos, como Stracciatella que es un helado cremosos con frutas secas, Tiramussu que es un postre típico en Italia, Dulce de leche que sabe como los dulces que se hacen en Alvarado, Frutas del bosque que son frutillas de color rojo entre muchos otros sabores. Sólo hay que tener cuidado al consumirlos, no es recomendable más de un helado diario como lo hizo una servidora, pues podrían abonar kilos extras a nuestro peso ideal.



En Italia tanto hombres como mujeres son fashionistas, en ese país he visto a los recogedores de basura más guapos(as) y arreglados(as) del mundo. La chicas que trabajan en la limpia pública parecen modelos más que gente que trabaja con basura, van con el cabello planchado al trabajo, recogen las bolsas de basura en una esquina, suben a su camioneta, se quitan los guantes, sacan un espejo para retocar su maquillaje y comprobar que siguen tan guapas como siempre (en las cosas que se fija una turista con pretenciones de socióloga). En Italia vi que las chicas fueran maquilladas y en zapatillas a la playa, cosa poco usual entre las mexicanas. Pero los chicos no se quedan atrás, vi a hombres con las cejas depiladas. Los italianos están obsesionados con la figura, hacen mucho ejercicio para mantenerse en forma, gastan muchos euros en cámaras de bronceado y demás cosas para estar más que presentables. Los chicos son guapos y se saben guapos, a las extranjeras nos coquetean pero no porque les interese entablar un cortejo o les interese la cultura de tu país, lo hacen para reafirmar su virilidad y galanura.



Los Italianos son latinos y no pueden ocultarlo, en Europa la gente es sumamente puntual, por ejemplo, las corridas de los trenes y autobuses tienen horarios como 10:48 y uno se pregunta porque mejor no 10:50 o ya a las 11:00, total, al final seguramente salen a esa hora, pensamos la mayoría de los mexicanos, pero no, resulta que respetan el horario y en verdad los trenes sales a las 10:48. Cuando un tren llega a retrasarse 3 o 5 minutos, lo anuncian y la gente se molesta mucho, pues un retraso de 5 minutos representa la modificación de toda su rutina. Bueno, en Italia pueden darse el lujo de retrasarse hasta 20 minutos, pasa poco, pero la gente no suele molestarse tanto como en los países del norte. Otro rasgo latino es lo escandalosos que pueden ser cuando hablan con alguien, gesticulan mucho, gritan, se ríen, manotean y les encanta la fiesta como a los jarochos (Veracruzanos). Los italianos me parecieron un poquito engreídos y poco interesados por lo que acontece en el mundo. No sólo lo pensé yo y mi idiosincrasia mexicana, sino que muchos europeos opinan que los italianos son los más engreídos de toda Europa, los italianos se defienden diciendo que son celos, incluso un mexicano viviendo allá me dijo, “para los europeos los italianos son como para nosotros los argentinos”.

Sin embargo hay que recordar que Italia le ha dado muchas cosas al mundo y la cultura en general. Gran parte de la historia de Europa se concentra ahí, muchos movimientos artísticos, culturales y literarios han emanado de ese país, así como grandes pensadores sociales. Italia ha sido testigo de lo peor y de lo mejor del mundo.

Continuará...




Foto: Nancy Ortiz y Evelyn Hérnandez

jueves, 20 de noviembre de 2008

CRÓNICA de Bochil Chiapas



Y por fin, estamos en Bochil
Por Octavio García Hernández
Lic. Sociología por la Universidad Veracruzana

Para poder llegar al municipio de Bochil localizado en la región norte del estado de Chiapas, hay que abordar una urban en la TTT (Terminal de Transferencia de Tuxtla) a un costado del “Mercado de los ancianos” y sitio en donde parten los servicios a los demás municipios del estado. Pagando 35 devaluados y después de hora y media de curvas y más curvas, pasando por el Cañón del Sumidero, Chiapa de Corzo, Ixtapa, y Soyaló, llegas a la cabecera distrital. Cabe decir que el camino es de paisajes impresionantes sobre todo si subes durante el atardecer, este cielo chiapaneco conjunta una gama intensísima de azules y rojos durante esas horas del día. De igual forma sorprende, ahora si para bien, el estado de la carretera, siendo federal está muy bien diseñada, señalizada y pavimentada, esto no es casualidad, si lo comentas con los pobladores te dirán q obedece a dos cosas, una a que después del “conflicto” prácticamente todos los servicios se mejoraron en esta zona, y otra es que, en efecto; el ejército requiere de buenas carreteras para que puedan transitar constantemente sus unidades llenas de elementos militares, y es que pasando Chiapa de Corzo, la presencia militar se vuelve una constante.

Así como me lo habían platicado, imaginaba este lugar francamente más jodido y más pequeño, sin embargo prácticamente toda la cabecera municipal está pavimentada, hay servicio telefónico residencial, buena recepción de telefonía celular, TV cable ( es pirata, acá unos listillos se roban la señal de Sky y ese es el servicio de cable, por 140 pesos gozas de 40 canales entre ellos HBO y Movie City! Aunque, lástima, no ofrecen canal 22, canal once ni CNN ) hay mini súper y mueblerías locales, zapaterías, clínica del ISSSTE y un hospital de IMSS tamaño medio bastante presentable y que ofrece el servicio a toda la población que compruebe residir en el municipio independientemente de si gozas de algún otro servicio médico, todo en un radio no mayor a 2 Km cuadrados y sorpresa, en este pequeño espacio que recorres de lado a lado en menos de media hora a pie, existen: Urbans, taxis y bicitaxis!! Si! Y lo mas sorprendente es que la gente los aborda! Señoras para ir al mercadito, niños para ir a la escuela, el taxi te cobra 10 pesos a donde vayas, bicitaxi 3 y urban 4 pesos, lo anterior ocasiona que caminar se vuelva peligroso porque con tal cantidad de autos (aparte acá mucha gente posee auto, sobre todo funcionarios de distintas dependencias que han tenido que venir a residir aquí y están acostumbrados a su uso) y lo angosto de las banquetas, pues hay que andar a las vivas. De lo único que si se carece es de sucursales bancarias (dirán los dueños del dinero que quien chingados querrá ahorrar en Chiapas o tal vez teman que ante un nuevo levantamiento vayan en primera instancia sobre sus sucursales bancarias) y eso sucede en toda esta zona norte del estado, en Bochil solo hay una pequeñísima sucursal de banorte cuyo cajero siempre está abarrotado y que te cobra 8 pesos por retiro independientemente de lo que te cobre tu banco (en mi caso, banamex, te cobra 20 pesos por retiro en cajero ajeno!, Hijos de su…)

La vivienda tampoco es tan fácil de encontrar ni tan barata como me aseguraron, hay muchos cuartos para gente sola pero casas lo que se dice casas no, como me traigo a mi familia yo necesitaba una de esas y encontré una a muy agradable a solo dos calles de mi trabajo con 2 recamaras sala, comedor, cocina, baño dentro (que ya es ganancia, acá se acostumbra el baño afuera) y mega patio trasero, todo en arquitectura tipo “rancho” y por 1500 al mes, y pues ahí estoy y para no extrañar vivo en el Barrio Orizaba, que hasta el momento nadie me ha sabido decir porque se llama así.

Si has vivido en una ciudad media o grande te cuesta trabajo adaptarte a vivir en estas condiciones, me refiero a que no hay cafeterías, librerías, samborns, chedrauis, sorianas, etc. no llega el periódico nacional solo uno de Tuxtla que se llama Cuarto Poder y eso a veces, siempre ves a la misma gente, no hay oferta cultural…en fin no convives con cosas que en otro tipo de lugar pudieras encontrar, sin embargo se agradecen y disfrutan otras mas como el hecho de que acá no hay prisas, tienes mucho tiempo para pensar, leer, escribir, andar, observar, conversar, verdaderamente se nota la diferencia en el aire que respiras, el agua con la que te bañas, es como decía mi amigo Choco Milk, una especie de retiro espiritual (sin iglesia, claro, aunque si quieres acá digamos q abundan, hay tres de buen tamaño y varias capillas ).

Cantinitas muchas, pero sin espíritu, digo, como algunas de Orizaba, depósitos de cerveza también varios… y barata. Modelo y Cuauhtémoc ambas en toooodas sus presentaciones, así; supongo que cuando el espíritu lo requiera esa será la opción, los depósitos ya que dicen, las cantinas a cierta hora suelen tornarse peligrosas; se acostumbra mucho el cuartito o si no quieres alcohol te vas al parque central a disfrutar de un pozol de cacao o blanco oyendo música, claro está de marimba chiapaneca. En estos lares pega duro también la banda y eso del pasito duranguense, afortunadamente ya no más Juniors Klan, Zenvers, Jaime Villalobos ni nada que se le parezca, acá ni los conocen. Otra cosa que notas de inmediato y que es de agradecerse es que dejas de notar el color rojo en todas las instalaciones, programas de televisión y propaganda oficiales.

El clima es de montaña, aunque salga el sol es frío pero soportable, lluvioso en estos meses pero una lluvia fina, similar a la de Orizaba clima que te invita a un buen café, claro, chiapaneco, orgánico, cultivado y comercializado por alguna de las varias organizaciones indígenas que en esta región se dedican a la industria del café

Desde Bochil puedes abordar taxis o urbans que también, por 35 pesos te llevan a San Cristóbal de las Casas en poco mas de hora y media disfrutando de un paisaje distinto al que te lleva a Tuxtla, así como de otras cosas, como algunos municipios autónomos zapatistas y la Junta de Buen Gobierno de San Andrés Sacamch'en de los Pobres, pero eso será motivo de otra crónica.

Colaboración de
Octavio García Hernández
Desde Bochil, Chis
11 noviembre de 2008

lunes, 27 de octubre de 2008

CRÓNICA sobre Chiapas por Octavio García

Llegando a Chiapas…


Por Octavio García Hernández

Ingeniero y Sociólogo por la UV


Llegar a Tuxtla Gutiérrez por carretera desde el DF y justo después de salir de los límites entre Chiapas y Veracruz se convierte en toda una odisea y te orilla a varias reflexiones, entre las que recuerdo son ¿Cómo es posible que una carretera que es de cuota pueda estar en tal mal estado?, ¿Por qué ninguna autoridad hace nada efectivamente? ¿Cuántos accidentes ha producido esta carretera? ¿Cuántas pérdidas económicas se han sucedido debido a los cierres que han ocasionado los constantes derrumbes? Independientemente de las condiciones climáticas ¿Será que estas carreteras se encuentran en tal mal estado solo porque estamos en Chiapas y no en Guanajuato, Guadalajara o Monterrey? Mientras piensas no te queda otra que arrellanarte en los “confortables” asientos del ADO y encomendar tu integridad física a los que dicen ser los “conductores mejor capacitados de todo el país”.



La primera impresión que me llevo al llegar a la capital del estado de Chiapas es la de arribar a una ciudad que ha crecido notablemente en los últimos años sin ninguna planeación, con poca dedicación en la estética urbana y en donde las grandes plazas comerciales han llegado tarde en relación al resto del país, es decir, percibes que te encuentras en una ciudad que se encuentra en plena transformación capitalista.

Con poco más del medio millón de habitantes, Tuxtla es el referente político y comercial en toda la región. Para quien viene de una ciudad en donde el pulpo camionero y los taxistas son quienes imponen las condiciones en el transporte público, resulta por lo menos extraño que esta ciudad y en general todo el estado se mueva a base de “Urbans” que son el transporte más popular y que, aunque sumamente incómodo, resulta ser barato y eficiente. De manera general puede apreciarse que te encuentras en una ciudad limpia y digamos tranquila en lo que se refiere al tránsito en sus avenidas. La nomenclatura de sus calles puede ser un dolor de cabeza para quien no esta acostumbrado a los orientes, ponientes, nortes y sures, no así para quien viene de Puebla u Orizaba, costumbre que facilita en mucho el tránsito por estas calles.




Arquitectónicamente Tuxtla es una ciudad sumamente pobre, con varios edificios que en su momento pretendieron ser “modernos” y que hoy lucen horrendos por su diseño y por el descuido en que se encuentran. Mientras caminas por sus calles y si inhalas hondo y pones atención notarás que se respira un aroma peculiar, si ser aroma de mar si es uno con notas de humedad, de vegetación, limpio y a la vez mezclado con notas provenientes de las montañas, fresco, y con remembranzas de bosques de pinos, digamos que es aroma de sur y ya no de sureste.



En cuanto a servicios de hospedaje y alimentación, para ser ciudad capital y en una revisión y uso mas bien fugaz, me parece que se puede afirmar que es una ciudad barata, de tal forma que, en términos generales se puede decir que es una ciudad agradable, cosa que se reafirma cuando, mientras te comes unos ricos tacos de “cochito” escuchas a solo unas cuadras los ecos de la marimba que invitan a disfrutar de sabroso baile popular.

Llevo dos días en esta ciudad y me ha parecido agradable, por el momento no puedo dedicarme a turistear con mayor enjundia, ahora debo atender algunas cuestiones mas simples y burocráticas. He venido a trabajar al IFE después de participar en un concurso, no sé si competitivo pero por lo menos si muy masivo, en donde gane una de las 40 plazas; y escogí por mi propia voluntad el distrito electoral federal 02 con cabecera en Bochil, Chiapas, distrito complejo y al que pocos quisieran llegar debido a su extensión, su complejidad cultural (alberga poblaciones Tzotziles, Tzeltales y Tojolobales), su dificultad geográfica, lo digamos…rústico de su cabecera distrital (Bochil) y por lo complicado en cuestiones políticas y sociales de algunos de sus municipios entre ellos Simojovel, El Bosque, Panteló, Pueblo Nuevo Solistahuacan, San Andrés Larrainzar y Chenalho (al cual pertenece la tristemente celebre comunidad de Acteal), todos ellos con eminentemente presencia zapatista. Conozco mi distrito tan solo por Internet así que pienso que aun quedan muchas cosas más por conocer.

jueves, 15 de noviembre de 2007

CRÓNICA de viaje a París



París: Crónica de un viaje anunciado
Por. Nancy Ortiz
Alumna de Sociología SEA UV







La llegada
A París llegué en autobús, un autobús más corriente que común, incomodo, sin baño y que hacía paradas innecesarias, es obvio suponer que es más barato que el tren y el avión. La ventaja de viajar por Europa es que en unas cuantas horas uno ya se encuentra en otro país, así que el martirio no dura mucho tiempo.
La terminal parisina es caótica y un poco sucia como casi todas las terminales de las grandes ciudades. Fue relativamente sencillo viajar en el metro parisino pese a no saber francés, el metro es bastante caro en comparación al que tenemos en el DF, así que uno no puede darse el lujo de andarse equivocando.
Lo más complicado del arribo era cargar la mochila de viajero, no la recomiendo para viajes largos, uno termina deseando que se la roben para no cargar más. Jure que la próxima vez que anduviera de mochilera lo haría con maleta de rueditas.
Me hospede en un modesto hotel frente a la estación del metro Pasteur, cerca de Montparnasse. Maurice (el recepcionista) ya tenía mi pequeño cuarto apartado, con vista al boulevard Pasteur, era cómodo y relativamente barato, era una ventaja poder contar con baño y agua propia. Según me han dicho eso es un lujo en París.


El sena
Lo primero divertido que hice fue caminar por la orilla del río sena. No se, tal vez iba un poco cansada pero el río Sena me pareció algo ordinario, sobre todo viviendo en Veracruz donde los ríos olorosos y revueltos abundan. Claro, no todos los ríos tienen el gusto de atravesar París, por ello el Sena parece ser mirado con otros ojos.
A las orillas del río hay muchos pequeños cafés, negocios de souvenir, librerías de viejo, boutiques, galerías, restaurantes y demás. A las orillas se juntan personas que hacen teatro callejero, o quieren vender algunas de sus obras de arte. El atardecer al rededor es bonito, sobre todo por el ambiente cosmopolita que se vive. Los turistas se encuentran, intercambian sonrisas y miradas como si compartieran el mismo pensamiento, seguramente sí ¡Estoy en París!
Los turistas se distinguen fácilmente por ser ellos los que no andan con prisas ni traen mala cara. Mucho se ha dicho sobre las actitud de los parisinos, que son hoscos, no les gusta perder el tiempo en cortesías, les choca que les hables en ingles y demás, todo parece cierto, sin embargo, también hay parisinos amables, coquetos y dispuestos a brindarte su ayuda si les hablas en español.
Por la noche la cosa se pone aun más bonita, París es más bella de noche. El Sena se llena de embarcaciones luminosas que ofrecen servicios de bar y restauran, el romanticismo deambula por el Sena. El romanticismo al alcance por unos cuantos euros.



La torre
La famosa torre Eiffel, ubicada en avenue Gustave Eiffel no es tan hermosa de día como de noche. Por la noche brinda un espectáculo de luces que dura 15 minutos cada hora ,es espectacular. Bajo la torre los jóvenes parisinos se juntan a convivir, sacan sus botellas de vino, quesos, cantan y demás, todo muy bohemio. Los estereotipos a la orden del día.
Tengo que confesar que antes de subir la torre no me pareció tan espectacular. Mientras hacía una fila que duró más de dos horas para poder subir hasta el top me preguntaba si la torre no formaba parte de una construcción social, un símbolo de glamour y romanticismo, fetichismo puro, pensaba que realmente había visto cosas mucho más bonitas y baratas que la torre, sin hacer tanta fila ni esperar tanto. Llegue a pensar que sólo quería subir para poder decir que estuve ahí, pero realmente no me parecía tan espectacular mientras esperaba, el color me decepcionó un poco, no sabía si ese era su color original o si estaba cubierta por polvo. Llegué a la conclusión de que si la torre hubiera sido colocada en otro país probablemente no hubiera tenido el mismo éxito. Pensé en todo ese valor agregado, todas las cuestiones simbólicas que representa y conforman nuestro sistema de creencias. Tuve el mal tino de expresar mis pensamiento con una persona que desde la infancia soñaba con subir a la torre y me mando por un tubo, me dijo que cómo podía pensar eso, que la torre era bonita, porque era bonita, y que le gustaba porque era bonita. Y que mis reflexiones las dejara para otro momento, para otro lugar donde no fuera tan caro estar. Para cuando estuviera con mis amigos raros que les gusta cuestionarse todo.
Vapuleada me puse a observar a la gente, mucho asiático, frente a mi estaba una familia conformada por un caucásico y una oriental, con 4 hijos: 1 varón, 2 jovencitas y una niña, las adolescentes eran una mezcla exótica entre un ingles y una vietnamita (sólo supuse las nacionalidades) las jóvenes parecían modelos de Bennetton, tan bellas que en cuanto podía trataba de mirarlas.
Nos anocheció haciendo fila para entrar y eso que en Verano oscurece después de las 9 de la noche. Finalmente entramos. Llegué el top y quise maldecirme por haber dicho que la torre me parecía fea. Tenía que penetrar la torre para convencerme de su belleza. París de noche visto desde la torre es espectacular, hubiera pasado ahí toda la noche de no ser porque mi tiempo estaba delimitado por el horario de la torre y del metro. Rápidamente bajamos como pudimos, en ascensor y por las escaleras para poder ver el espectáculo de luces que se da cada hora. Valió la pena el tiempo de espera, por fin veía la torre, tengo que confesarlo yo también soñaba desde niña que visitaba París, imaginario o no la torre por la noche es mágica, encanta y le prometes volverla a ver.


El Louvre
El museo es enorme y hermosa arquitectura, tal vez necesite de varias semanas para poder recorrerlo con detenimiento. A las afueras hay pedigüeños que cantan opera y tocan violín a cambio de algunas monedas, los estereotipos se confirman, todo lo parisino es chic.
El museo tiene obras bellísimas, por eso no entiendo la necedad de la gente de sólo querer ver la Gioconda, mejor dicho si lo entiendo, pero me molesta un poco. La Gioconda de Da Vinci no es ni por asomo la mejor obra de ese museo, ni la mejor ni la más espectacular, es una obra bastante pequeñita que casi nos la sabemos de pe a pa. En fin.
Cuando salí del Louvre, aun en el patio, saque una manta para manifestarme contra el fraude electoral que México acababa de pasar y los guardias de seguridad rápidamente corrieron a pedirme que guardara mi manta, sólo lo supongo pues no hablo ni jota de francés, así que camine unos cuantos metro y la volví a sacar pretextando que no había entendido nada. Se juntaron otros mexicanos y se tomaron una foto con la linda manta que hasta florecitas tenía, los guardias hicieron lo suyo y volvieron a pedirme esta vez en un tono más enérgico que guardara esa manta (lo volví a suponer) sólo atine a decir -¿No que estamos en un país donde los principales valores son la "libertad, igualdad y fraternidad"?- Los franceses no supieron que contestarme, bueno, tal vez ni siquiera supieron que les quise decir.


La despedida
Salí de París en la madrugada, huí antes del amanecer para que no viera mi partida, tomé un mercedes que se decía taxi, paseamos un poco por Des Champs Elysees, algunos aun no se iban a dormir.
Llegamos al lugar donde nos recogería el autobús que nos llevaría al aeropuerto. Llegamos al aeropuerto ya por la mañana. Me subí a un avión más corriente que ordinario, donde a empujones hay que hacerse de un lugar, morder al de al lado para que te ceda el asiento que quieres. Como supondrán el avión era más barato que el tren. En fín. Me subí con un grupo de francófonos y me baje con el mismo grupo pero parlando italiano. En el aire se insertaron un chip para rápidamente cambiar de lengua. Me Impresiona la manera que tienen los europeos de comunicarse en varios idiomas, una conversación la pueden seguir hasta en 5 idiomas. Es como estar en la Torre de Babel. En el fondo no envidio mucho esa cualidad, siento que no podría desarrollar mucho el pensamiento con tantos cambios de códigos.
París quedo atrás. Vi  y disfruté más cosas, los edificios, los pastelitos franceses, las baguetes, la gentileza de los parisinos, las fuentes, las catedrales, la arquitectura, las esculturas, el ambiente, las librerías de viejo, las tiendas de discos, las boutiques, los centros comerciales, las botellitas de agua evian por 2.5 euros, el Internet por 5 euros la hora, la comida árabe, china, etc.
Hay muchas cosas en París, se necesitan varios días  para poder disfrutarla completamente. La ciudad sin duda es muy preciosa, sin embargo creo haber estado en otras ciudades igual o más bellas. Claro, con estilos y personalidades diferentes.


fotos: Nancy Ortiz

martes, 20 de marzo de 2007

CRÓNICA de viaje a Holanda



Holanda: Laboratorio Social

Por Nancy Ortiz
Alumna de Sociología SEA UV
El laboratorio
Holanda es un país curioso para el resto del mundo, cuando queremos hablar de un país desarrollado o raro siempre lo tomamos de ejemplo. Nos sorprende que los gay puedan casarse, que la eutanasia esté permitida, que sus gobernantes vayan en bicicleta al trabajo y sobre todo que la marihuana sea “legal”. Un buen amigo holandés dice “no es que Holanda sea muy civilizada, simplemente no nos interesa que hace el otro y por eso casi todo es permitido”. El sociólogo catalán Manuel Castells dice que en el mundo se esta viviendo un proceso de ensimismamiento y que eso ocasiona indiferencia incluso para la confrontación, en tal sentido él lo encuentra peligroso pues opina que eso detiene la evolución de las sociedades. Algo similar podría estar ocurriendo en Holanda, donde uno de los principales problemas que encuentra el gobierno es que la gente no se saluda, leyeron bien, la gente no se saluda y el gobierno lo considera un problema nacional. Otro “problema” es la falta de cortesía en las salas de chat por Internet, tan grave lo consideran, que el gobierno mandó a instalar anuncios publicitarios en los paraderos de camión donde le pide a los holandeses que se comporten amablemente cuando están navegando por la Internet. Ya quisiera México ese tipo de problemas.

Papá Gobierno

El gobierno Holandés parece ser un buen ejemplo de lo que algunos consideran un gobierno populista, una de las tantas medidas es sobre la vivienda. Si no tienes casa el ayuntamiento de tu ciudad te proporciona un departamento; los holandeses se quejan un poco de que las casas no son muy bonitas, pues se parecen un poco a los departamentos de interés social que hay en México, con la diferencia que en Holanda son mucho más bonitos, más grandes, mejor hechos y mejor ubicados. También existe un seguro de desempleo que se encarga de mantenerte hasta que logres encontrar trabajo, muchos holandeses viven de esas prestaciones toda su vida.

Otra de las características del gobierno holandés, es la eficiencia que hay en sus oficinas y dependencias de gobierno, los trámites son muy rápidos y atienden en menos de 10 minutos. Los holandeses están tan acostumbrados a que el gobierno resuelva sus problemas que si un día de verano se le ocurre ser demasiado caluroso, los holandeses hablan a las dependencias de gobierno para pedir que hagan algo al respecto, pero lo más curioso es que seguramente el gobierno holandés considera esas demandas con seriedad.


País de caricatura
Holanda parece ser una permanente postal, un país de caricatura, con sus casitas de techos puntiagudos, sus gatos gordos y peludos, manzanas colgando de los árboles, sus caminitos para las bicicletas, sus calles limpias, sus enormes abejorros de colores brillantes, en fin, todo en perfecto orden. Un orden tan perfecto que puede ser agobiante. Para los latinos puede ser tan exótico que hasta asusta. 
      La bicicleta es el transporte predilecto de los holandeses, hay carriles especiales para ellas, con señalamientos especiales, tal vez sobre decir que la bicicleta tiene preferencias sobre el automóvil al momento de conducir y los peatones tienen preferencia ante las bicicletas.
      Las ciudades en Holanda son muy cercanas entre sí. 15 minutos en tren y nos encontramos en otra ciudad con características y personalidad diferente.
Hay una pequeña pero bella ciudad de pescadores llamada Volendam, donde es popular comer arenque (pescado) crudo acompañado con cebolla, oliva o algún tipo de aderezo, para ser honesta, quién escribe no encontró este platillo muy exquisito que digamos, sin embargo parece ser muy popular entre ellos.

Ámsterdam
La ciudad más popular, poblada y grande de Holanda. Es una ciudad muy moderna y cosmopolita, el idioma menos escuchado es el neerlandés.

La ciudad se caracteriza por sus canales, donde hay pequeñas embarcaciones acondicionadas como casas. Y otras embarcaciones destinadas al paseo de los turistas. A los suburbios la ciudad se torna ultramoderna, los edificios se caracterizan por la rareza de sus diseños, para los holandeses el diseño y el arte son importantes, entre más raro sea algo, más “artístico” lo encuentran.
La ciudad tiene museos famosos como el de Vincent Van Gogh y Rembrandt, donde se muestran obras de los famosos pintores. Hay uno que no es tan bonito y culto como los anteriores, pero es entretenido y divertido para los turistas, es el Museum of sex, donde se muestran cosas relacionadas con el sexo a lo largo de la historia, ahí uno descubre o corrobora que los más locos para el sexo son los orientales.
Otra de las características de la ciudad son los coffee shops, donde la principal mercancía que venden es la canabbis en un sin fin de presentaciones y variaciones. Tal vez por esa razón el centro de la ciudad huele constantemente a mota, ya que es permitido consumirla incluso en la calle.
Una atracción más es la zona roja, es el sitio más visitado en Ámsterdam, hay gente de todo el mundo, algunos transeúntes llevan atuendos raros, otros simplemente prefieren andar en trajes de baño, sin pantalones o sombreros locos. Las prostitutas se exhiben en lujosas vitrinas, ellas se encuentran caracterizadas, disfrazadas o en diminuta lencería, las hay de todos los colores, tamaños y formas. En la zona hay centros nocturnos donde se presentan diversos shows incluso sexo en vivo. Ámsterdam es un sitio visitado por grupos de jóvenes de todo el mundo, pues es un lugar relacionado con mucha droga y sexo.
En Ámsterdam hay muchos centros nocturnos, con gran variedad de conceptos, los hay para intelectuales donde se escucha mezcla de jazz con música electrónica. Están las discotecas donde no puede faltar la clásica Lambada, que es considerada una canción especial para el verano, hay centros latinos, donde se juntan algunos holandeses con colombianos, dominicanos, cubanos, puertorriqueños, mexicanos, africanos, etc. Hay una gran variedad de culturas, muchos están de paseo, otros radican allá y otro tanto son inmigrantes ilegales.
Los holandeses caucásicos, ¡Pobres!, no tienen nada de ritmo, inventaron un bailecito hace algunos años que es una especie de zapateado pero sin ritmo, a los latinos nos cuesta mucho trabajo bailarlo, pues hay que quitarle el ritmo para poder bailar como ellos.

Holanda es un país que puede ofrecer mucho, parece que hay de todo, incluido un frío aterrador.
fotos: Nancy Ortiz
FOTOS: Nancy Ortiz