viernes, 26 de noviembre de 2010

NOTICIA Boletín de Prensa: Muévete por la Educación


Coalición ciudadana por la EDUCACIÓN
Xalapa, Veracruz, 25 de Noviembre de 2010.
BOLETÍN DE PRENSA.
BAJO EL LLAMADO ¡MUÉVETE POR LA EDUCACIÓN! PERSONAS Y ORGANIZACIONES DE LA SOCIEDAD CIVIL VERACRUZANA CREAN SE UNEN A LA MOVILIZACIÓN NACIONAL CIUDADANA PARA MEJORAR LA CALIDAD DE LA EDUCACIÓN EN MÉXICO
  • · SE INTEGRA EL CAPÍTULO VERACRUZ DE LA COALICIÓN CIUDADANA POR LA EDUCACIÓN, FORMADO POR UNA DIVERSA GAMA DE ORGANIZACIONES, ACADÉMICOS Y PERSONAS INTERESADAS EN MEJORAR LA SITUACIÓN DE LA EDUCACIÓN EN VERACRUZ.
  • · LLAMAN A LA SOCIEDAD EN GENERAL A TOMAR CONCIENCIA Y DISCUTIR SOBRE LOS PROBLEMAS DE CALIDAD Y LAS DESIGUALDADES QUE HACEN QUE VERACRUZ ESTÉ EN LOS ÚLTIMOS LUGARES NACIONALES DE LOGRO EDUCATIVO.
  • · COINCIDEN CON LA COALICIÓN CIUDADANA POR LA EDUCACIÓN EN LA URGENCIA DE ROMPER EL ARREGLO POLÍTICO-CORPORATIVO ENTRE LA CÚPULA DEL SNTE Y LAS AUTORIDADES EDUCATIVAS Y SE SUMAN A LA EXIGENCIA AL PRESIDENTE PARA QUE CAMBIE LAS REGLAS QUE PERMITEN LA INJERENCIA DEL SINDICATO EN LA POLÍTICA EDUCATIVA
  • · EXIGEN AL NUEVO GOBIERNO DE JAVIER DUARTE DE OCHOA QUE NOMBRE A AUTORIDADES EDUCATIVAS COMPROMETIDAS CON LA CIUDADANÍA Y AJENAS A LOS INTERESES DE LAS CÚPULAS SINDICALES.
Con la finalidad de impulsar una gran movilización nacional, ciudadana, plural y apartidista para enfrentar el arreglo político corporativo que está afectando de raíz al sistema educativo, se presentó el capítulo Veracruz de la Coalición Ciudadana por la Educación que se suma a la Coalición Ciudadana por la Educación, que se dio a conocer el 20 de noviembre en la ciudad de México.
Alberto Olvera Rivera, de la Universidad Veracruzana, Silverio Soto, del Observatorio Veracruzano por la Educación, y Carlos Rossainzz, de la Red Cívica Veracruzana hablaron en nombre del Capítulo Veracruz de la Coalición Ciudadana por la Educación, que está conformada por un grupo de personas y organizaciones civiles convencidas de que la educación es un derecho social esencial y un bien público primordial para el crecimiento económico del país, para la democracia, para la justicia y la seguridad ciudadana y se sumaron a las 170 personas y 35 redes y organizaciones civiles adherentes en toda la República.
El objetivo de la movilización es cambiar las reglas escritas y no escritas del sistema educativo que crean una “simbiosis atípica” entre sindicato y autoridades que permite 1) la intromisión de la dirigencia sindical en la política educativa, 2) la omisión de las autoridades en su función como garantes del derecho a la educación y 3) la exclusión de la ciudadanía en la gestión y la rendición de cuentas sobre la educación.
El capítulo Veracruz de la Coalición ciudadana presentó algunos datos oficiales de cobertura y calidad que muestran las consecuencias de estas reglas del sistema educativo y que tienen al estado por debajo de la media a nivel nacional en logro académico. Usando estadísticas oficiales del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) mostraron que el 59,5% de los veracruzanos no cumplen con la norma de escolarización mínima; y que el 75% de veracruzanos no cumple con la norma de educación básica que marcan la constitución y la Ley General de Educación. También resaltaron que, en las últimas mediciones de la prueba PISA (2006), el 77,1% de los estudiantes de 15 años lograron bajo rendimiento en el Estado en matemáticas, por debajo de la media nacional, y que el 63% de los estudiantes de tercero de secundaria no alcanzan el nivel básico de logro en la prueba EXCALE en matemáticas.
En concordancia con recientes pronunciamientos de organismos internacionales y diversos foros en el país, la Coalición enfatiza que una de las causas centrales de los malos resultados educativos está en el arreglo político corporativo entre las autoridades educativas y la cúpula del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), que obstaculiza la mejora de la educación en aspectos clave como el ingreso, la capacitación y la promoción de supervisores y directores, así como en los incentivos y apoyos para lograr que los mejores maestros y maestras enseñen en las escuelas públicas.
Por esta razón, una primera acción del capítulo Veracruz es exigir al gobierno de Javier Duarte de Ochoa que nombre a autoridades educativas comprometidas con la ciudadanía y ajenas a los intereses de las cúpulas sindicales.
La Coalición exhorta a la ciudadanía a sumar su voz para exigir al gobierno federal y a los gobiernos de los estados, tomar las siguientes acciones como los pasos iniciales de la transformación de la Educación:
1. Cambio de las reglas que posibilitan la intromisión de la dirigencia sindical en la política educativa y que le conceden de facto el derecho de veto, derogando los decretos, reglamentos y normas generados a partir del Decreto del Reglamento de las Condiciones Generales de Trabajo de 1946, que han propiciado un acuerdo político corporativo que daña al sistema educativo.
2. Promover la profesionalización del magisterio. Crear un auténtico servicio profesional de carrera educativa basado en desempeño y capacidad, que reconozca a maestros, maestras, directores y supervisores como servidores públicos, promueva su reconocimiento social y garantice sus derechos.
3. Transparencia en los recursos manejados por la cúpula del SNTE y reducción de comisionados sindicales: Hacer públicas todas las transferencias directas e indirectas de recursos públicos a la dirigencia sindical, y reducir el número de las “comisiones con goce de sueldo”.
4. Participación y vigilancia ciudadana para supervisar las nuevas reglas y promover la mejora de la calidad en la educación.
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Los integrantes de la Coalición invitaron a la ciudadanía a adherirse a través de la página www.porlaeducacion.mx, o en los foros y eventos que se realizarán en todo el estado.
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Para mayor información a medios de comunicación, favor de contactarse con:
CAPÍTULO VERACRUZ. OSWUALDO ANTONIO, OBSERVATORIO VERACRUZANO DE LA EDUCACIÓN.
TEL: 22 81 18 71 31
observatorioveracruzano@yahoo.com

COALICIÓN NACIONAL. ANGÉLICA PINEDA BOJÓRQUEZ, ÁREA DE COMUNICACIÓN Y VISIBILIDAD INSTITUCIONAL DE ALIANZA CÍVICA, A.C.
TELS: 56 74 68 02 y 56 74 59 37
Cel: 044 55 43 53 30 67
angepineda@alianzacivica.org.mx
angepineda@yahoo.com.mx

sábado, 2 de octubre de 2010

NOTICIA Presentación de Libro

"Instituciones garantes de derechos y participación ciudadana en México: los límites de la democratización"


La imaginación situada: una lectura de(sde) el compromiso crítico.[1]
por Armando Chaguaceda[2]

El presentar esta obra implica para mí un doble compromiso. El que emana de la complejidad de valorar, sin loas ni superficialidades, un trabajo que reúne los aportes de varios autores (y en especial de un compilador) a quienes me acerca el afecto personal y la admiración intelectual y cívica. Esfuerzo este que, como extranjero, me induce a pensar globalmente, o mejor glocalmente, los impactos y repercusiones de una obra que -estoy seguro -no dormirá tranquila en los estantes de las bibliotecas.
Se trata de un trabajo que, a falta de mejores clasificaciones, podremos definir como un acto de imaginación situada. Imaginación que recrea las radicales demandas epistémicas y transformativas de autores como Charles Wright Mill y Pierre Bordieu, en cuyos cauces la violación de las fronteras disciplinares, la ruptura de los vicios académicos y la defensa de una politicidad autónoma del campo intelectual son elementos estructurantes del hacer científico emancipador. Estamos, además, frente a un libro orgánicamente situado en las trayectorias de dos instituciones como la Universidad Veracruzana y el CIESAS, comprometidas con el sostenimiento de la autonomía y la justicia social frente a las amenazas colonizadoras del poder y del dinero.
Hace unos meses, en un evento de la UV, insistí en la pertinencia de actualizar las grandes preguntas permanentes de la Filosofía Política (enfocadas en las formas y fines de un régimen virtuoso) vinculándolas con la cartografía precisa y propositiva derivada de un análisis de las políticas públicas realmente existentes. Se trata de no seguir reduciendo la política a las acciones autorreferentes de los gobiernos, de no confundir ciudadanos con clientes, de no abandonar la justa pretensión de universalidad y exigibilidad de las políticas sociales, tendencialmente sustituidas por programas focalizados, de ejecutoria manipulable e insuficiente. Este libro, con su diversidad de paradigmas teóricos y disciplinares, trayectorias personales (políticas o académicas) y focos temáticos, es una buena respuesta a mi demanda de entonces, al articular un balance y valoración al proceso incompleto, mediatizado y asediado de la transición democrática mexicana.
Quiero destacar algunos elementos relevantes de la obra. En primer lugar la insistencia en revelar los nexos (existentes o potenciales) entre las agencias estatales y las organizaciones sociales, encontradas –o enfrentadas- en los predios de las políticas de desarrollo, seguridad, promoción de derechos y cobertura social. En otro orden, se agradece la actualización del debate teórico con especial asidero en las demandas y miradas provenientes de América Latina y en lo más avanzado de la teoría social global, lejos de lecturas parroquiales y de las viejas y nuevas modas que proclaman la caducidad de las ideologías y el advenimiento de estados fallidos. En esta dirección el libro da continuidad a un acumulado previo de experiencias de investigación-acción a cargo de Alberto Olvera, Ernesto Isunza y Felipe Hevia, entre otros autores, sobre temáticas de innovación democrática e institucional, los vínculos estado-sociedad civil y la confluencia de proyectos políticos.
Al relanzar esos presupuestos, el libro permite superar la lamentable visión aldeana (en su doble sentido cívico y gnoseológico) que reduce la “política posible” en nuestro horizonte de acción a la grilla, el golpeo, la prebenda, el chantaje, la estafa y el acarreo, manifestaciones perversas que tristemente permean las visiones de políticos, comunicadores y no pocos ciudadanos. Situación que encuentra su contraparte en el descompromiso, el mercenarismo y la postulación de una supuesta racionalidad individualista presentada como inherente a las conductas sociales, modas estas que infiltran no pocas instituciones, agendas y trayectorias personales de nuestro mundo académico.
Por último, como cada quien habla de sus propios presupuestos personales, quiero destacar que encuentro en esta obra un esfuerzo analítico particularmente útil para desbrozar el camino al proyecto político democrático participativo de una izquierda postneoliberal y postautoritaria, capaz de estar a la altura de los cambios culturales nuevo siglo y de los desafíos de una región como Latinoamérica récord en desigualdades sociales. Una alternativa que, al promover instancias de participación ciudadana y rendición de cuenta, interfaces socioestatales para las políticas públicas y agencias realmente veladoras de los DDHH y el mediombiente, ponga bridas al onanismo de clases políticas impresentables y al desenfreno (franco o simulado) de los poderes fácticos. Sólo así superaremos el estadio actual de democracias delegativas, electorales o i-liberales, las derivas personalistas de todo signo ideológico serán desterradas y se cumplirá el imperativo de aquel informe PNUD de 2004 que nos compulsaba a crear, en nuestros países, auténticas “democracias de ciudadanos y ciudadanas”.

[1] Texto leído en la presentación del libro -compilado por Alberto Olvera- titulado “Instituciones garantes de derechos y participación ciudadana en México: los límites de la democratización”, actividad realizada el 29 de septiembre de 2010, en la Biblioteca Carlos Fuentes (Xalapa) en el marco de la Feria del Libro Universitario (FILU) de la Universidad Veracruzana.
[2] Politólogo e historiador, doctorante de la UV, miembro del Observatorio Social y Co-coordinador del Grupo de Trabajo Anticpitalismo & sociabilidades emergentes del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

ARTÍCULO sobre el huracán Karl


Las tragedias de Veracruz


Por Alberto J. Olvera, Investigador del IIHS de la Universidad Veracruzana


Veracruz vive la peor catástrofe natural de su historia. Pero la terrible tragedia social que vive la zona conurbada del puerto de Veracruz a raíz de los efectos del huracán Karl —que se suma a la que siguen padeciendo los habitantes de la cuenca del Papaloapan y las zonas sur y norte de la entidad por efecto de las lluvias previas— no debe verse solamente como una lamentable contingencia natural. Se trata de una combinación de desastres naturales y de un gigantesco desastre social causado en gran parte por la ausencia u omisión del Estado.


Es en las crisis extremas donde salen a relucir la pobreza, la improvisación, la corrupción en las obras públicas, la falta de regulación en el desarrollo urbano y los costos humanos de la impune destrucción de la naturaleza prohijada por la ambición.


Más de la mitad de los municipios de Veracruz han sido afectados por los desastres del último mes, y hay cientos de miles de damnificados desesperados ante la pérdida total o parcial de sus escasísimas propiedades, sin expectativa cierta de recuperar en un horizonte previsible sus casas y sus medios de subsistencia. La precariedad de la vida de millones de veracruzanos se exhibe hoy en los medios nacionales como imprevisible y súbita tragedia, cuando en realidad el desastre se ha venido produciendo lentamente a través del tiempo.


En primer lugar, desde que los gobiernos municipales han permitido —ante la inexistencia de programas de vivienda popular adecuados— que cientos de miles de familias finquen sus precarias casas en lugares de alto riesgo, en la ilegalidad, implicando la modificación de frágiles paisajes naturales en barrancas, laderas, orillas de ríos y lagunas, humedales inundables, áreas desecadas, etcétera.


Esta omisión es criminal, como tantas veces se ha comprobado a lo largo de la historia de los desastres en México. En el área conurbada del puerto de Veracruz hay inmensos fraccionamientos, hoy bajo el agua, construidos en zonas inundables, a pesar de que los planes de desarrollo urbano prohibían los desarrollos inmobiliarios en ellas. No atender el problema de la vivienda popular o hacerlo de manera fraudulenta y engañosa, con fines clientelares, es condenar al riesgo permanente a los sectores más pobres de la población.


En segundo término, el desastre se magnifica ante la inexistencia, mala calidad o inoperancia de obras y servicios públicos fundamentales. El gobernador Fidel Herrera ha construido más de mil puentes a lo largo de su mandato, varios de los cuales colapsaron en la reciente catástrofe, poniendo al descubierto, al menos en ciertos casos, la pésima calidad de su construcción.


En la zona conurbada del puerto el drenaje pluvial ha sido siempre deficiente, pues se inunda la ciudad cada vez que llueve con intensidad. No hay un dragado sistemático de los canales de aguas negras ni de los ríos azolvados por la tierra suelta a raíz de la tala de bosques. Los caminos y calles se construyen sin dotarlos de drenajes adecuados y sin importar la afectación de cuerpos de agua, manantiales y escurrimientos, por mencionar solamente algunos problemas.


Hoy se entiende mejor el grave error que ha implicado el no haber creado, como lo sugirieron los especialistas desde hace años, redes de observación meteorológica e hidrométrica en todo el estado. Durante el sexenio estatal anterior desapareció el Servicio Climatológico y Meteorológico del Gobierno del Estado, y no se ha repuesto en el actual. El Consejo Científico Asesor de la Secretaría de Protección Civil, que se fundó en noviembre de 2008, nunca ha sesionado formalmente. La protección civil fue entendida como el mantenimiento y activación de redes de ayuda a damnificados, basadas en el territorio, cuyo diseño se basa en una ingeniería electoral y no en las necesidades derivadas de diagnósticos científicos.


A esta situación se suma la incapacidad de análisis social y económico del gobierno estatal, que a la fecha carece de instrumentos para cuantificar los damnificados, los daños y los costos de la reconstrucción, lo cual, por otro lado, es conveniente a la hora de no rendir cuentas de los recursos recibidos. Esta incapacidad es compartida por el gobierno federal, que en sus declaratorias de zonas de desastre ha cometido errores absurdos, como dejar fuera a los municipios más afectados por el meteoro.


El desastre toma a Veracruz en medio de una guerra declarada entre el gobierno estatal y el gobierno federal, iniciada en el periodo electoral y no concluida a la fecha. Las elecciones y esta guerra han dejado al gobierno estatal en una crisis financiera de proporciones históricas, aun antes de las inundaciones y del huracán. El gobierno carece de fondos para pagar su parte del Fonden. Las deudas del gobierno con proveedores, gobiernos municipales y entidades autónomas son aterradoras.


Esta suma de desastres naturales, guerra intergubernamental e incapacidad estatal es el marco en el cual los ciudadanos de Veracruz deben enfrentar la peor crisis de la historia, basados ante todo en sus propias fuerzas. Esta debería ser la oportunidad para exigir un gobierno más eficiente y responsable y poner un alto a la improvisación, la demagogia y la politización de la tragedia.


Tomado de: http://www.eluniversal.com.mx/editoriales/49948.html?awesm=fbshare.me_ATUtr

jueves, 16 de septiembre de 2010

NUMERARIA Gastos del bicentenario


Numeraria bicentenaria




· Vajilla Bicentenaria: 1 millón 881 mil 500 pesos (Leyeron bien, ¡1 millón 881 mil 500 pesos!).

· Estela de Luz: 690 millones de pesos (Monumento caro, sin chiste y con materiales extranjeros que se colocará en 2011. Acero inoxidable importado de Finlandia y forjado en Italia, con 3,500 placas de cuarzo brasileño ¡Viva México!).

· Lo que pagaron al arquitecto César Pérez Becerril por proyecto ganador del monumento bicentenario: 16 millones 373 mil 706 pesos. (¿ya vieron el diseño?, son como dos reglas paradas).

· La Victoria Alada: 39 millones 200 mil pesos (escultura instalada en Expo Bicentenario en Guanajuato).

· Expo Guanajuato Bicentenario: 1,100 millones de pesos.

· Parque bicentenario: 2 mil millones (por cierto, las obras estaba programadas para 2010 y la mayoría están inconclusas).

· Presupuesto federal para gastos del festejo del bicentenario: 2 mil 971 millones 600 mil (empezó con 50 millones y los fue agrandando, si burros no son.)

· Ceremonia de exhumación de los restos de los héroes de la patria: 2 millones 387 mil 493 pesos (sólo la ceremonia, cómo para qué).

· Espectáculo del 15 de septiembre: 580 millones de pesos.

· Programa de eventos conmemorativos, que se transmitió en Televisa: 16 millones 373 mil 706 pesos (recuerden que para Calderón es más importante la TV de calidad que la educación de calidad).

· Espectáculo multimedia en Palacio Nacional del 15, 17, 18 y 19 de septiembre: 123 millones 982 mil 774 pesos (Donde, por cierto, para entrar tenías que tener pulserita VIP).

· Colocación de la primera piedra del monumento conmemorativo del Bicentenario: Un millón 567 mil 440 pesos (Quizá era piedra preciosa).

· Número total de actos para festejar el bicentenario: 2,300 (con 1 era suficiente, ok, dejémoslo en 200 actos).

· Años que el senado debe esperar para conocer el monto total de los gastos del 15 de septiembre: 12 años (que las cuenta no van a salir claras hasta dentro de 12 años, a ver si ya se nos olvidó).

Bailarines y músicos para festejo del 15 de septiembre: alrededor de 10 000.

· Espectadores en el zócalo el día 15: 50 000.

· Agentes de seguridad: alrededor de 14000.

· Efectivos del Ejército, Marina y Secretaría de Seguridad Pública federal en desfile: 18 mil 116.

· Personas bicentenarias en pobreza: 57 millones. (Si ganas más de 1 dólar al día, ya no eres pobre según ellos).

· Personas bicentenarias sin servicio de salud: 12 millones

· Lo que gana al mes cada uno de los 500 diputados de la legislatura bicentenaria:152, 446 pesos, (más prestaciones).

· Pago del ministro bicentenario: 347 mil pesos (Más prestaciones).

· Hombres disfrazados de revolucionarios y colgados de un puente el 16 de septiembre: 2.


Referencias

· http://mexico.cnn.com/bicentenario/2010/08/23/12-datos-para-entender-las-celebraciones-del-bicentenario-en-mexico

·http://mexico.cnn.com/entretenimiento/2010/02/11/mas-de-2300-actos-conmemoraran-los-200-anos-de-la-independencia-de-mexico

· http://www.eluniversal.com.mx/columnas/86003.html

· http://www.eluniversal.com.mx/notas/677320.html

· http://www.milenio.com/node/487639

· http://www.proceso.com.mx/rv/modHome/dehttp://actualidad.rt.com/actualidad/america_latina/bicentenario/issue_13969.html?rc=1talleExclusiva/83430

· http://www.jornada.unam.mx/2010/08/19/index.php?section=opinion&article=019a2pol

· http://www.jornada.unam.mx/2010/09/12/sem-jorge.html

· http://www.sipse.com/noticias/65062-vajilla-cena-presidencial-costara-casi-millones-pesos.html?utm_source=twitterfeed&utm_medium=twitter

· http://vivirmexico.com/2010/09/siete-fueron-los-principales-gastos-del-bicentenario-eran-todos-necesarios

· http://momento24.com/2010/09/16/bicentenario-de-mexico-es-afectado-por-la-controversia/

sábado, 21 de agosto de 2010

ARTÍCULO sobre las cuotas de inscripción en las escuelas


Cuotas de inscripción: ¿voluntarias o forzosas?

Por Nancy Ortiz

En este nuevo inicio de ciclo escolar, algunos diputados y funcionarios del gobierno de Veracruz, una vez más comienzan a enarbolar el artículo 3º de la constitución que habla sobre la gratuidad de la educación y aconsejan a padres de familia no pagar las cuotas “voluntarias” que piden en las escuelas. Es verdad que la mayoría de las escuelas exigen pagar estas cuotas, pero estas cuotas son necesarias para la subsistencia de las mismas.


La actitud de la clase política resulta chocante por estar sustentada en premisas falsas. A continuación enumeraré algunos argumentos del por qué son declaraciones desproporcionadas y contradictorias, que lejos de orientar y sensibilizar a los padres desinforman y generan una percepción errónea de la realidad:


1. La mayoría de las escuelas no reciben subsidios ni financiamiento para su mantenimiento.

2. La gratuidad expresada en el artículo 3º se cumple solamente parcialmente, el estado lo único que paga es el salario de los maestros.

3. Las escuelas tienen la necesidad de mantenerse con las cuotas de los padres.

4. Una escuela generan gastos como: pago de luz, agua, teléfono, internet, papelería de oficina (gasto de impresión, fotocopias, hojas, folders, sellos, tinta, etc.) material de limpieza (cubetas, trapeadores, escurridores, franelas, esponjas, jabón, papel de baño, detergente, toallas, cloro, limpiadores, etc.), equipo de computo, equipo de audiovisual, mantenimiento de edificio escolar (pintura, impermeabilizante, etc.), material didáctico, entre muchas otras cosas más.

5. Estos gastos se solventan con las cuotas de los padres de familia y acciones de recaudación económica entre padres y maestros.

6. Sólo en algunos casos se llegan acordar subsidios el pago de agua y luz.

7. Las supervisiones escolares tampoco reciben ni subsidio ni financiamiento alguno, son mantenidas gracias a las cuotas de los profesores y padres de familia.

8. Una supervisión escolar genera casi los mismos gastos que una escuela.

9. Hay edificios de supervisiones escolares que fueron construidas gracias al trabajo y colaboración de maestros y padres de familia.


Decir que no se deben pagar las cuotas “voluntarias” de inscripción, es dejar sin fondos económicos a las escuelas, es desinformar a los padres de familia sobre la situación real que viven las instituciones educativas día a día. Esta posición es cómoda, pero un tanto perversa, enarbolan el principio de gratuidad sin resolver el problema del mantenimiento.


Es verdad, los padres no deberían pagar nada, pero el Estado debería hacerse cargo de proveer todos los recursos. Lamentablemente esa no es la realidad mexicana. Los diputados prefiere legislar a favor de “invertir” 120 millones para cambiar el tablero de la cámara de diputados (cuando muchos ni van a trabajar) que en educación. Prefieren elevar sus gastos (para 2010) a 5 mil 444 millones 124 mil, mientras el pueblo sufriendo la alza de gasolina e impuestos. El ejecutivo federal tiene un presupuesto para comunicación social de 5 mil 152 millones 693 mil pesos por año. Y qué decir de los onerosos gastos de campaña, cada espectacular cuesta alrededor de 12000 pesos al mes y nos tapizan calles y carreteras de publicidad de candidatos (podría seguir enumerando gastos inútiles).


Acaso no son ofensivos estos gastos, sobre todo que salen directamente del erario. Como consecuencia tenemos que el presupuesto a la educación es más limitado año con año y es un presupuesto que, absurdamente, no contempla el mantenimiento de las escuelas de educación básica.


Estoy a favor de que los padres no paguen cuotas de inscripción, pero para ello, pido y como ciudadana exijo, algunas cosas:


1. Que se cumpla a cabalidad el sentido de gratuidad en la educación.

2. Que el estado contemple un presupuesto especial para el mantenimiento de todas las escuelas.

3. Que las escuelas sean proveídas de los recursos necesarios para su adecuado funcionamiento.

4. Que los recursos públicos sean razonablemente distribuidos.

5.Que los funcionarios sean pagados como servidores públicos y no como potentados.

6. Menos gastos a campañas electorales y mayor presupuesto a la educación.

7. Menos gasto a publicidad y más gasto destinado a la ciencia.

8. Menos gasto a la “guerra contra el narco” y más dinero a programas de concientización.

9. Una adecuada recaudación fiscal, no caería nada mal, comenzando porque las grandes empresas paguen sus impuestos.

10. Y por último más información y menos distorsión.


Los padres de familia, lamentablemente, tienen que pagar cuotas, porque nuestros gobernantes prefieren gastar el dinero público en cosas más banales que en educación.