miércoles, 4 de abril de 2007

ARTÍCULO de opinión sobre el aborto de Arturo Juárez

Libertad de abortar o
abortar las libertades


Por Arturo Juárez Martínez, Sociólogo

Considero que a ninguna mujer encinta, le resultaría fácil decidir abortar cuando vislumbra que su proyecto de vida se verá seriamente afectado por las responsabilidades que conlleva tener un hijo. Sin embargo, dentro de la oferta de posibilidades de un régimen que se presume democrático debe existir tal camino; interrumpir el embarazo sin perjuicios físicos y penales no debe ser estigmatizado por grupos contrarios a tal medida, que fundamentan sus argumentos en conceptos morales o religiosos con una ligera tonalidad científica que les permita ganar adeptos en los estratos seculares de la población.

Amparado en el fallecido sociólogo alemán, Niklas Luhmann, sostengo que cuando alguien esgrime su voz para abordar un tema, que se discute en la esfera pública, amparado en la moralidad, no habla en nombre de toda la sociedad; es común encontrar afirmaciones y pretensiones universales que blinden el cuerpo discursivo de los actores en pugna por imponer sus opiniones a las diferentes audiencias. En cuanto a esto, es necesario distinguir entre temas y opiniones; por lo tanto, en esta ocasión el tema es: la inclusión de la obstrucción al proyecto de vida de la mujer dentro de las causas legales en el DF para abortar; a diferencia de las opiniones a favor o en contra que genera tal tópico.

Considero que los grupos contrarios a la despenalización de una causa más para abortar, fusionan el tema y las opiniones y “vuelven manipuladora la comunicación”[i] al pretender imponer en la esfera pública la percepción de que el tema a discusión realmente es asumir una posición a favor o en contra de la vida. Esta presunta manipulación, opera como un mecanismo eficaz para inhibir la capacidad de respuesta de las voces disímiles, en este caso los grupos a favor de tal legislación.

La distinción de tema y opinión es necesaria para establecer cómo se estructura el proceso de comunicación. Es claro que la discusión a favor o en contra de la vida, no tendrá las mismas implicaciones que debatir sobre la posibilidad de que las mujeres decidan si es positivo o no para ellas interrumpir un embarazo no planeado.

La aprobación de dicha iniciativa en la Asamblea del D. F., no supone que el aborto será obligatorio para toda mujer que a juicio del Estado trunque su proyecto de vida por la concepción de un hijo, tal medida sería propia de un estado totalitario, donde la vida privada es constantemente transgredida. Punible sería cuando a una mujer se le realiza un aborto en contra de su voluntad; por lo tanto aquellas mujeres que deseen concebir un hijo aún cuando no estaba dentro de sus planes a corto plazo, gozan de total derecho para realizarlo.

Es así que el tema es el derecho a decidir, despenalizar el derecho de la mujer a decidir sobre su cuerpo y su aspiración de vida. Si los grupos panistas consideran que el otorgar becas, empleos, guarderías, métodos de adopción, etc, son un camino para apoyar a las madres solteras es algo encomiable y otra opción por la cual optar; pero sería sólo eso, una opción más, no el único camino que ha dictado el Estado. Dejar abierta “la posibilidad siempre presente de que las cosas sean de otra manera”[ii].

[i] Rabotnikof, Nora, EL ESPACIO PÚBLICO Y LA DEMOCRACIA MODERNA, p.60

[ii] Ibid., p. 67
En respuesta al Debate Nacional sobre la Despenalización del Aborto. Desde la ciudad de Tlaxcala El Sociologo Arturo Juárez Martínez participa con su opinión.

1 comentario:

Anónimo dijo...

"El respeto al derecho ajeno es la paz", en este tema creo que debería predominar la tolerancia hacia la libertad de elegir sobre la interrupcion del embarazo. pero muy independientemente de estar a favor o encontra,legalizado o no legalizado es un hecho que se practica el aborto.
la diferencia al garantizar esta libertad, es que contaremos con el uso responsable de tal práctica.
Por aquellos que apelan tanto al estar en contra, muchas mujeres en México seguiran abortando con o sin su concentimiento, muriendo debido a las condiciones en las que se practican esos abortos clandestinos y sin información, niños no deseados con futuros precarios y sin oportunidades de vida y expuestos a tanto problemas sociales entre ellos la violación de sus derechos, la pederastía uno delos mas frecuentes y cometidos por quienes se ufanan en defender la vida y quienes tambien hacen uso de esa precariedad para obtener beneficios propios.
A conciencia de los lectores, no se pide dar la razón, si no, entender la libertad de lo privado, de ser tolerantes ante las diferencias para crear bases en una sociedad que aspira a la démocracia.

Orazio Barmez